No descarta volver a la política porque le tomó gusto a ese campo, sin embargo, aseguró que hasta el momento no ha mantenido ninguna conversación al respecto.
Por ahora María Luisa Ávila, ministra de Salud quien renunció a su cargo, piensa en volver al Hospital de Niños como pediatra infectóloga, el 1° de setiembre.
“El que digan de una eventual candidatura lo agradezco, pero no es algo que me parezca porque si hay algo que he criticado es a las personas que están un tiempo en la función pública y se creen presidenciables.
“Lo que siempre digo, como San Francisco de Asís: en política deseo poco y lo poco que deseo, lo deseo poco. Si se da, bueno y si no se da, también”, recalcó.
Ávila, de 50 años y quien tenía cinco de ejercer como jerarca de Salud, renunció ante la negativa de la presidenta Laura Chinchilla para que el Ministerio de Salud liderara el proceso de intervención que requiere la CCSS.
Chinchilla anunciará en los próximos días el nombre de la persona que sustituirá a Ávila.
“Como equipo nos fuimos”
Ana Morice, viceministra de Salud, no dudó en renunciar junto con Ávila. Es más, asegura que no fue una decisión personal de la jerarca, sino de todo el equipo.
“Como equipo que llegamos, lo que procede es, como equipo, también es renunciar y regresar a nuestros trabajos. Fue una decisión en conjunto”, dijo Morice.
Con ellas también renunciaron Mauricio Vargas, viceministro de Salud y la directora general de Salud, Rossana García.
“Desde que se decidió avanzar desde lo interno de la Caja, consideramos que no era conveniente seguir en el cargo”, aseveró Morice. Ella regresa como directora técnica del Inciensa.
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