San Carlos. - El guarda privado Jorge Guevara declaró ayer ante el Tribunal Penal de San Carlos que nunca tuvo la intención de matar a un colegial estadounidense, a quien sorprendió corriendo en un potrero aledaño al hotel que cuidaba, en el distrito sancarleño La Fortuna.
El adolescente, de 16 años, recibió un balazo en el corazón, con laceración de su pulmón derecho, la madrugada del 2 de junio del 2011, de acuerdo con informes en poder del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) y la Fiscalía.
Guevara figura como único acusado en el juicio oral y público por el delito de homicidio simple en perjuicio del menor.
La Fiscalía también lo acusa de portar una pistola 22 sin contar con el respectivo permiso, misma con la que disparó en aquel momento contra el estudiante.
El muchacho había llegado a La Fortuna el 31 de mayo del año pasado junto con otros 14 jóvenes de Kansas City, Estados Unidos, como parte de un programa estudiantil sobre turismo.
Hay dos versiones
Alexandra Mahoney, fiscal del Ministerio Público, afirmó en la lectura de la pieza acusatoria, que el colegial caminaba tranquilamente por los alrededores del hotel hacia la habitación junto a su compañero, Johon Peyton, cuando “Guevara con intención de quitarle la vida le propinó un disparo que le laceró el corazón y pulmón derecho”.
El acusado reaccionó diciendo que en plena madrugada vio dos sujetos correr con mochilas hacia el potrero aledaño al hotel.
“Les pedí que se detuvieran pero no lo hicieron. Entonces hice un disparo al aire y de seguido, entre la oscuridad, vi que dos bultos venían hacia donde yo estaba por lo que hice un segundo disparo, pero no con la intención de privar de la vida a alguien, fuera o no ladrón”, exclamó el imputado.
Guevara, de 35 años, afirmó que “mi trabajo era velar por la seguridad de los clientes”.