Monterrey/AP.- El motín que dejó 44 reos muertos este domingo en la cárcel de Apodaca, en Monterrey, fue planificado y permitió la fuga de 30 miembros del cártel de Los Zetas, informó ayer el gobernador del estado de Nuevo León, Rodrigo Medina.
En rueda de prensa, Medina confirmó el número de fugados, que hasta ahora era indeterminado, y dio a conocer sus nombres y fotografías de los huidos. Pidió a la prensa a divulgar el listado y las fotografías.
Es muy importante que quien tenga información respecto a su paradero nos la proporcione y que la gente participe y colabore para recapturar a estos fugados, dijo el gobernador, que ofreció una recompensa de 10 millones de pesos ($782 mil) por datos que permitan ubicarlos.
El motín no fue fortuito sino planeado como una riña entre Los Zetas y sus rivales del cártel del Golfo, explicó el gobernador, que agregó que la acción fue preparada con tiempo y contó con la complicidad de algunos funcionarios.
Sin esa complicidad no podría haberse realizado (la fuga), afirmó Medina.
Informó que están detenidos y bajo investigación desde el alcaide al jefe de seguridad hasta los 18 custodios de servicio en la sección en la que se produjeron la riña y la fuga.
La traición, la corrupción y la complicidad de algunos comprometen la imagen de los buenos funcionarios, añadió.
Caerá el que tenga que caer y pagará el que tenga que pagar, enfatizó. Señaló que los 44 muertos en la reyerta en la prisión de Apodaca, en el norte de México, pertenecían al cártel del Golfo.