Vivir Hoy
Sábado 28 de julio de 2012, Costa Rica

Sáquele el jugo a las frutas de temporada y cargue a sus hijos de energía pura

Sanas y sabrosas

Neyssa Calvo Achoy

ncalvo@aldia.co.cr

Cuando las frutas están a la orden del día hay que sacarle provecho y llevarlas hasta la mesa de su casa por su fuente de vitaminas y minerales.

La nutricionista Adriana Navarro informó que su consumo es esencial para el adecuado funcionamiento del organismo.

“Muchas contienen sustancias antioxidantes y son responsables de la prevención del cáncer, enfermedades cardiovasculares y el envejecimiento”, dijo Navarro sin dejar de destacar que además contienen fibra, esencial para el mantenimiento del sistema digestivo.

¿Qué cantidad hay que consumir? Los expertos en nutrición se recomienda ingerir al día como mínimo cinco porciones de frutas y vegetales.

Según Navarro se pueden consumir en el transcurso del día. Por ejemplo, en el desayuno, la merienda de media mañana y la de la tarde. Así como postre a la hora del almuerzo, ya sea sola o acompañada de algún yogurt o helado bajo en grada y endulzado con un edulcorante.

Y es que la naturaleza es muy sabía, pues ofrece lo que el cuerpo necesita. Es decir, en invierno abundan los alimentos ricos en vitamina C para reforzar el sistema inmunológico.

La nutricionista Marcia Pérez destacó que en la calle abundan, precisamente los jocotes que contien vitamina C así como las fresas que además son una fuente de potasio e hierro y por su efecto antioxidante se consideran protectoras del corazón.

Otro que circula en las verdulerías son los aguacates, considerado un fruto afrodisíaco, y con un alto contenido de vitamina E y grasa insaturada.

Siguen sus pasos, la papaya, el mango y la piña una aliada para la buena digestión.

Manos a la obra

Poco es más. El color y la presentación en el plato atraerá la atención de sus hijos. Sírvalas peladas y en trozos pequeños.

Variadito. Mantenga en su refrigerador las frutas para su conservación y si lo deja fuera procure que este en un sitio fresco y ventilado. No olvide lavar antes de comer.

Vea y toque. No compre fruta dañada: con magulladuras, la piel desgarrada o picada.