Estados Unidos/AP .- Gary Coleman, el diminuto astro de la serie televisiva de los 70 “Blanco y negro”, falleció ayer tras sufrir heridas cerebrales por una caída en su casa, en Utah.

La vocera del Centro Médico Regional de Utah Valley, Janet Frank, dijo que el respirador artificial que mantenía al actor con vida fue retirado y murió al mediodía.

Coleman fue hospitalizado el miércoles en el centro médico luego de la caída. Siendo en lo que va del año su tercer internamiento.

Su esposa Shannon Price y otros familiares cercanos estaban al lado del Gary en el momento de su muerte, apuntó su representante, John Alcanter, en un comunicado de prensa.

El pequeño actor de 10 años, en la serie, era quien arrancaba las carcajadas de los televidentes.

Nació con una enfermedad congénita del riñón que detuvo su crecimiento a una edad temprana llevándolo a desarrollar una estatura de 1,40 metros, lo que se convirtió en su característica más distintiva.

Las relaciones de raza y clase se convirtieron en temas de la serie tanto como las típicas aflicciones de crecer. Con sus ojos brillantes y una perfecta intuición para saber cuándo soltar un chiste, Coleman fue un astro inmediato y convirtió su frase “¿De qué hablas Willis?”, dirigida a su hermano, en una moda.

Pero la atención de su papel representaría para él un placer y un peso.

Coleman dijo a la agencia AP en el 2001 que volvería a actuar en series de televisión, pero sólo bajo la condición de que sea con un reparto y que todos tengan la oportunidad de brillar.

Con el paso de los años siguió siendo blanco de los flashazos, pero por sus problemas financieros y legales, además de la enfermedad renal que lo obligó a someterse a diálisis y a dos trasplantes.

Más bajos que altos

Gary Coleman residía en Santaquin, al sur de Salt Lake City.

Con su personaje de “Arnold” logró ganar hasta 100 mil dólares por capítulo y con ello se convirtió en uno de los actores mejor pagados de la televisión en horario estelar.

A finales del año pasado fue sometido a una cirugía cardíaca que se complicó por una neumonía.

En febrero, se declaró culpable de un cargo menor relacionado con un hecho de violencia doméstica en el 2009.

Continuó apareciendo como invitado en programas de televisión e interpretando pequeños papeles a través de los años.