Miguel Calderón Suárez
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Aserrí. - José Rodrigo Monge García, de 51 años, salió ayer muy temprano de su hogar a reparar el techo de la casa de una vecina.

Lo que jamás se imaginó fue que este sería el último trabajo que realizaría en su vida.

Don Rodrigo, quien era padre de dos muchachas, falleció luego de resbalar y caer de una escalera cuando apenas intentaba subir al techo de la vivienda.

El hecho se registró a las 8:15 a.m. en Aserrí, contiguo al cementerio de la localidad.

Carlos Padilla, policía local, informó que Padilla, por razones aún desconocidas, perdió el control y cayó de espaldas desde una altura de tres metros contra el piso de cemento, golpe que le quitó la vida de forma instantánea.

Al lugar se hicieron presentes varios testigos y familiares de la víctima, quienes estallaron en llanto al conocer la noticia.

Gabriela Porras, sobrina del fallecido, aseguró que su tío murió haciendo lo que más amaba.

“Era una persona muy trabajadora, humilde, le apasionaba todo lo relacionado con construcción y reparación, especialmente en casas”, manifestó.

Agregó que Monge ya estaba pensionado, pero que siempre le realizaba “trabajitos” a los amigos y vecinos de la zona.

“Todos lo buscaban por su dedicación y buena labor”, recordó la muchacha de 25 años.

Ayer se intentó hablar con su esposa y dos hijas, pero prefirieron no dar declaraciones.

Ovidio Jiménez, testigo de los hechos y amigo de Monge, contó que “solo escuché cuando Rodrigo cayó al piso. Fue un golpe muy fuerte y sumamente rápido”, aseguró. El cuerpo del constructor será enterrado hoy en la mañana en el cementerio de Aserrí.

“Siempre le daba una sonrisa a la vida”, finalizó su sobrina.