La verdad tarde o temprano sale a la luz. El popular animador “Kiko” Robles está devastado al enterarse que no es el padre de quien él creía era su hijo.
Luego de que él y su exesposa, Melissa Romero llegaran a un acuerdo, el pasado jueves 11 de octubre, en el cual se le otorgó al menor de 13 años a Romero, muchas dudas quedaron en el aire, sobre todo por las declaraciones de ambos.
Algo no cuajaba, por la extraña actitud de Robles, quien se veía como derrotado, con la mirada perdida y por dejar de un momento a otro de pelear por la custodia del adolescente.
Además influyó mucho el deseo tajante del pequeño de querer vivir con su madre.
Las sospechas se confirmaron ayer, cuando Al Día se enteró que Robles, por medio de su abogada Eugenia Quesada, de Fundación Instituto Apoyo al Hombre, interpusieron al mediodía en los Tribunales de Goicoechea una acción de impugnación de paternidad.
Consultado sobre esto, la representante legal confirmó el hecho.
“Cuando mi cliente me contó la historia de cómo se enteró de su supuesta paternidad, yo inmediatamente le aconsejé que se hiciera un prueba de ADN”, manifestó Quesada.
Según el documento de cinco hojas, del cual Al Día tiene copia, Robles se hizo dicha prueba el pasado 29 de setiembre en el Clínica Laboratorios Echandi.
“De los cinco marcadores, todos salieron negativos, cuando con tres ya está excluido, o sea, que Robles no puede ser el padre”, contó Quesada.
La abogada manifestó que Romero tuvo 48 horas para pedir otra prueba, pero no lo hizo.
La “ex” más bien aceptó el “engaño” en un documento y ambos acordaron llegar a un acuerdo amistoso, el pasado jueves.
La historia
En el documento se puede leer que la pareja integrada por Robles y Romero tuvo una breve relación amorosa.
“Ella se desapareció 11 meses y llegó con el niño un día antes del Día del Padre de 1999. El bebé tenía dos meses de nacido. Nunca antes hizo por dónde contactar a Robles”, describe el papel.
Según la abogada Quesada, “Kiko” haciendo un acto de muy buena fe, basado en sus principios y enternecido por las condiciones infrahumanas en las que vivía el niño, decide hablar con su familia y proponerle matrimonio a Romero, para darles hogar y una buena educación al pequeño.
En el documento legal se explica que Robles tuvo que vender su carro, su moto y otras pertenencias para hacerse cargo de la responsabilidad que él pensaba tenía.
“Robles pesaba 430 libras, la autoestima la tenía por el piso, como él mismo me lo expresó, y esto le cambió su mundo y le estaba dando luz a su corazón”, contó la licenciada.
Todo cambió
Conforme pasó el tiempo la pareja tuvo problemas, como ya todos saben y se separó el 3 marzo del 2009. El 24 de junio de ese mismo año firman el divorcio.
El pequeño se quedó a vivir con Robles, quien lo tuvo hasta que se empezaron a dar los problemas entre los exesposos, hace unos meses.
Consultado sobre esto, Robles no quiso ahondar en el asunto.
“El dolor es inminente, pero el sufrimiento es opcional. Toda la familia está sumida con esta pena”, manifestó Robles.
De hecho, se supo que él está bajo tratamiento psicológico y psiquiátrico, con medicación, para calmar su estrés.
La abogada explicó que con acción de impugnación de la paternidad del menor se pide que se declare en sentencia que el niño no es de Federico Robles y se modifiquen los apellidos.
“Mantenemos además las medidas cautelares que tiene ‘Kiko’ a su favor, para que su ex no se le acerque”, añadió.
“Kiko” manifestó que él no deja de querer al pequeño. “Los buenos momentos quedarán y el amor, pero ya las responsabilidades no serán las mismas”.
Con respecto a este caso, Melissa Romero manifestó que Robles siempre lo supo.
“Federico tenía conocimiento desde el principio de que no era su hijo y ahora viene a victimizarse ante la prensa, cuando él voluntariamente hizo el reconocimiento ante el Registro Civil del niño. No es hijo de matrimonio, es un hijo reconocido, porque padre no es el que engendra, sino el que cría”.
La abogada de Romero, Amalia Ocampo, manifestó que su cliente ya no se referirá más esta situación.
“No vamos a referirnos más al asunto. No le vamos más a dar aire a esta polémica. De ahora en adelante lo que se tenga que definir, se hará en los tribunales”, manifestó.
