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Hospitalizaron ayer al Papa
Gripe se complica
Ciudad del Vaticano/EFE y AFP. El Papa Juan Pablo II fue internado ayer "por precaución" en el Policlínico Gemelli de Roma, por una aringotraqueitis aguda y espasmos de la laringe provocados por un empeoramiento de la gripe que sufre desde el domingo pasado.
El Pontífice, de 84 años, fue trasladado al hospital romano después de que a media tarde de ayer se confirmara desde la Santa Sede que su estado no revestía especiales problemas y que incluso le había desaparecido la fiebre que le sobrevino el pasado domingo, pese a que persistía la tos.
Poco antes, el portavoz vaticano, Joaquín Navarro Valls, dijo que el Papa padecía "un proceso gripal caracterizado por esos síntomas tan bien conocidos por millones de italianos en estas fechas" y que debido a ello "han sido aplazadas las actividades previstas para los próximos días".
"En estos momentos -agregó- no se puede prever cuantos días durará esta situación, pero lógicamente será un aplazamiento por breve espacio de tiempo", añadió Navarro.
El Papa, quien en mayo cumplirá 85 años, había agradecido ayer en la mañana las oraciones de numerosos católicos por su salud. "Como siempre, el Santo Padre agradece las oraciones de los fieles y de todos aquellos que lo quieren. Creo que esta cercanía vale mucho para él", dijo Navarro a Radio Vaticano.
Debido a la epidemia que afecta a cerca de 6 millones de personas, según las últimas cifras divulgadas por la prensa, el Pontífice tuvo que anular también la celebración de un misa solemne en la basílica San Pedro, programada para hoy en la tarde con ocasión de la jornada de la vida consagrada.
Cientos de mensajes escritos y electrónicos para pedir por la salud del Papa, han sido enviados al Vaticano.
Navarro aclaró que Juan Pablo "no está en un servicio de reanimación. El Santo Padre está en su habitación", declaró.
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