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Al que madruga...
El expresidente Óscar Arias repartió besos, abrazos y discursos ayer en Cartago, en el inicio de su gira nacional como precandidato.
José RIVERA/Al Día
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Arias "guerrea" por TLC
Ayer inició gira nacional Sylvia ALVARADO MARENCO
salvarado@aldia.co.cr
"Espero que se convierta en un guerrero en defensa del TLC. El TLC es imperativo. Ya se fueron muchas maquiladoras y muchas empresas más no van a venir. No habrá oportunidades de empleo para gente como usted".
Así le contestó ayer el expresidente y precandidato liberacionista Óscar Arias a un joven cuando le preguntó cuáles eran sus propuestas para gente como él, capacitada, que no encuentra trabajo.
"Nadie va a querer invertir aquí si no damos acceso al mercado más grande del mundo. Eso es demasiado obvio como para que alguien no quiera entenderlo", añadió.
A año y un día de las elecciones, Arias arrancó su gira nacional en cuatro localidades de Cartago, donde trató de convencer a decenas de dirigentes sobre la necesidad de que se discuta y apruebe el TLC con Estados Unidos, "la mayor oportunidad para que el país despegue".
Más tarde, reconoció a Al Día, con preocupación, que no ha podido convencer al presidente Abel Pacheco de que envíe el acuerdo para ser discutido por los diputados.
"Le he dicho al Presidente que no debería condicionar el envío del TLC a que se apruebe el plan fiscal, pero no nos ha escuchado. Puedo seguir insistiendo, pero mucha gente le ha dicho lo mismo. Yo creo que para la gente joven eso va a ser el punto central de esta campaña".
El precandidato insistió en que éste no es el inicio de su campaña, pero repartió abrazos y besos a granel, recordó sus viajes y lucha por la pacificación de Centroamérica y se tomó decenas de fotos al son de "Paz para mi gente, paz para mi pueblo".
Garantizó que el eje de su eventual gobierno será hacer de Costa Rica el primer país desarrollado de América Latina y anunció, una vez más, que luchará por acabar con la deserción escolar y porque ningún joven de 17 años esté fuera de las aulas.
Pero también reconoció que la lucha por llegar a Zapote será dura.
"Después de lo que nos ha pasado, tenemos a dos expresidentes en la cárcel y el costarricense tiene derecho a haber perdido la confianza. Mi trabajo es convencerlos, sino recuperan la confianza, puede que salga un demagogo que ofrezca el oro y el moro".
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