Las encuestas

Unimer

Respecto a las últimas encuestas, lo que sí puedo afirmar categóricamente es que Unimer no falló.

Nuestro último estudio, realizado entre el 27 y el 31 de enero, identificó correctamente lo que estaba ocurriendo en el electorado. Indicamos que el apoyo hacia Arias estaba bajando y ya había perdido 7% respecto a lo medido en un estudio anterior. Mientras tanto, Solís había ganado 6% con una tendencia a seguir subiendo.

Los datos publicados daban a Arias un apoyo de entre 39% y 46%, con una tendencia a bajar, lo cual confirmó la elección. Señalamos que Solís tenía un apoyo de entre 27,9% y 35,1%, y que los indecisos se inclinaban más por él. Esa tendencia se concretó en las urnas el 5 de febrero.

Unimer mantuvo que el abstencionismo se ubicaba entre 35,4% y 41%. El 5 de febrero, no llegó a las urnas el 35% de los electores.

Descubrimos temprano la peculiaridad de este proceso electoral. Por eso, en esta ocasión recurrimos a metodologías innovadoras y a diversos estudios "cara a cara" en todo el país, que hicieron posible obtener información confiable de los entrevistados y describir el estado de la opinión del electorado.

Un panel de indecisos de 1.200 personas fue fundamental para explicar lo que estaba ocurriendo. Esas personas recibieron en sus hogares, en distintos momentos, a profesionales de Unimer con los que aceptaban compartir un café y su percepción sobre las elecciones. Así, al final de la campaña, detectamos los cambios que había en el electorado.

Contrariamente a lo dicho por los críticos de las encuestas, los costarricenses, en general, no estaban mintiendo respecto a lo que sería su comportamiento el día de la elección, ni lo encubrían por vergüenza. Simplemente, no sabían qué harían o tenían grandes dudas de votar por uno u otro candidato.

Finalmente, en los últimos días, y aun el mismo 5 de febrero, un porcentaje importante de votantes procedente del PUSC, ML, de otros partidos y de las personas que no simpatizaban con ningún partido, decidieron apoyar en mayor medida a Solís que a Arias.

La cultura política demostrada por los costarricenses en esta elección nos reafirma la madurez de nuestra democracia. Las encuestas son esenciales para comprender la evolución de la sociedad, coadyuvar en la calificación del desempeño de autoridades e instituciones, y fortalecer la democracia.