La pura verdad
Señores, hagan algo Edgar Fonseca, director
El Gobierno naufraga ante la gravísima inseguridad que vive el país.
Y, frente a la emergencia, el PAC es corresponsable.
Asaltos. Secuestros. Asesinatos. Extorsiones.
Muerte, violencia e inseguridad a la vuelta de cada esquina.
Nadie se siente seguro en las calles, en sus casas, ni en sus vidas.
Los sicarios empiezan a posesionarse de las vías públicas.
En los Hatillos, bandas de forajidos aterrorizan a las mujeres.
La seguridad hace aguas.
No es justo responsabilizar, del todo, a la presente Administración, pero no le ha entrado de lleno a la emergencia que vivimos.
El discurso oficialista, civilista, tan incensado en los foros de sabios o por los rojillos, está siendo hecho trizas por la temeridad de la ola delictiva de estos tiempos.
El narcotráfico, visible, nos empuja a un despeñadero.
Los ajustes de cuentas están a la orden del día y, en este maremágnum , nuestras calles empiezan a convertirse en tierra de nadie.
El Gobierno debe actuar.
Y el PAC, que en su visión de país parece aspirar a gobernar –si es que algún día se les da el chance– sobre las cenizas institucionales, es corresponsable de este desmadre.
Cualquier iniciativa por atender la emergencia la asumen como “militarismo”.
Deben rendir cuentas también.
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