En Cañas, Guanacaste

Salva a la hermanita de ser violada por padrastro

Sorprendió al sospechoso, de 36 años, cuando estaba a punto de ultrajar a la niña

Cañas, Guanacaste.- Una niña de nueve años estuvo a punto de ser violada por su propio padrastro de no haber sido por la oportuna y valiente actuación de un hermano seis años mayor, confirmaron ayer fuentes del OIJ local que investiga el caso.

El sospechoso, de apellido Pérez y de nacionalidad nicaragüense, fue sorprendido cuando estaba encima de la niña, a quien le tapaba la boca con su mano mientras la mantenía inmovilizada con la fuerza de sus piernas.

El hecho ocurrió el lunes en la madrugada pero no trascendió hasta ayer, se informó en el OIJ.

“¿Qué esta haciendo? ¡Por favor, suelte a mi hermanita!”, gritó el muchachito cuando sorprendió al padrastro que había entrado al cuarto que él compartía con su otro hermano de 11 años y, a dónde la niña se había pasado a dormir con ellos.

Pérez, de 36 años, se detuvo al oír el reclamo, saltó de la cama y, en medio del llanto de la niña, abandonó primero la habitación y luego la casa en una bicicleta.

Esto, presuntamente, ocurrió en el barrio Las Cañas, en el centro de ese mismo cantón.

El padrastro, de acuerdo con las investigaciones preliminares, le había dicho al jovencito de 15 años que fuera a comprar pan para el desayuno.

Iban a ser las 5:00 a.m., la madre acababa de salir a trabajar.

Al parecer esto había sucedido otras veces, le ordenaba al muchacho que se fuera a hacer mandados, como una excusa para él quedarse a solas con la chiquita en la casa.

El hermano, con una malicia natural y basado también en la observación de algunas acciones sospechosas del padrastro, accedió a cumplir el encargo, trascendió en el OIJ. Sin embargo, reconsideró y regresó a la casa.

Al llegar, le preguntó al hermano por el padrastro y éste le dijo que estaba en el cuarto de ellos, donde la hermanita, precisamente se había pasado a dormir.

La hipótesis policial es que la niña se había cambiado de cama para no quedarse a solas con el padrastro.

Ella, usualmente, ocupaba una cama en el mismo cuarto de la pareja, se informó.

Al volver la madre a la casa, los muchachos le comentaron lo sucedido, informó la policía.

El padrastro regresó y, la madre le reclamó por lo que había hecho. Pérez dijo que la niña era una mentirosa, pero ella misma notó algo extraño y llamó a la policía.