Según testigo, cuando supo del hallazgo de cuerpo de Maureen

“Burgos lloró, se hincó y rezó”

Madre de víctima y la de Zulay tranquilas porque hoy no hay juicio

Cuando Luis Fernando Burgos supo que su esposa Maureen Hidalgo apareció sin vida en un barranco de Atenas, lloró, se hincó e hizo una oración, afirmó el testigo Rodolfo Brenes, quien declaró ayer por la tarde en el juicio por la muerte de la mujer.

En el debate, que se realiza en los Tribunales de San José, Brenes dijo que fue a la casa de Burgos el domingo 16 de julio del 2006, a pedido de Adriana Rojas, una amiga de ambos.

Según su testimonio, Burgos decía que “no podía ser su chiquita” la que estaba muerta.

La idea de orar fue de él y lo hizo porque Burgos tuvo “un quebrantamiento” ante la noticia.

“Le dije a Adriana y a Luis Fernando que hiciéramos una oración. Nos hincamos y la hicimos”, recordó Brenes

“El quebrantamiento (de Burgos) ya fue llorando, con una cara diferente, ahí es donde le damos un poquito más de fortaleza”, añadió.

Brenes, quien es funcionario del Banco Popular, declaró que acompañó a Luis Fernando al funeral de Maureen. “En todo momento tuvo una actitud seria, que reflejaba dolor”, aseguró.

El testigo admitió que antes del 16 de julio, no había estado en la casa de Burgos.

Ayer también declaró el médico Luis Maden, quien dijo que como novios, la pareja era muy cariñosa. Destacó, empero, que una vez que vio a Maureen, luego de que se casó con Burgos, la notó “ida, diferente”.

Día de la Madre sin juicio

Vera Mora, madre de Maureen y Zahira Sánchez, la mamá de la fiscal imputada Zulay Rojas, dijeron sentirse tranquilas porque no hay juicio en el Día de la Madre.

“Yo prefiero que sea así. Estamos viviendo una etapa de duelo y para esta fecha lo siente uno mucho”, confesó Mora.

“Me siento más tranquila que mañana (hoy) no tenga que estar aquí presente, nos da paz para compartir con nuestras mamás”, manifestó Sánchez.

La madre de Zulay aseguró que seguirá acompañando a su hija hasta que termine el juicio.