Acusados de privación de libertad

Policías concilian

Puntarenas. - ¢2,5 millones les pagarán 10 policías a cada uno de los dos jóvenes que los denunciaron por privación de libertad durante un atropellado operativo antidrogas, desplegado en Santa Elena de Monteverde, el 23 agosto del 2000.

El arreglo no cobija al comandante, un policía de apellido Vargas, porque no llegó al debate y fue declarado reo rebelde por el Tribunal. Los jueces, Mario Gallardo, Marvin Cerdas y Geovanny Mena, solicitaron la captura.

Los policías pertenecían al Grupo Operacional Especial (GOE) del Ministerio de Seguridad Pública.

Los ofendidos fueron tres muchachos de apellidos Stuckey, Villalobos y Godar. Este último estadounidense que volvió a su país. Los arrestaron y encarcelaron varias horas porque, supuestamente, portaban marihuana, algo que nunca quedó acreditado.

“Las partes alcanzaron sus propósitos y eso es satisfactorio”, dijo Rándall Peraza, de la Oficina de Defensores Públicos.