Jueves 21 de mayo de 2009, San José, Costa Rica
Sucesos | Drama en Balsa de Lepanto, Puntarenas
Cazador muerto de balazo en cuello
Cuñado figura como sospechoso, actuó en legítima defensa
  • AlDia.cr
    Villalobos, al llegar ayer a los Tribunales. Julio Peña.
  • AlDia.cr
    El vehículo fue impactado en siete ocasiones. Julio Peña.

Julio Peña, corresponsal y Rodolfo Martín
rmartin@aldia.co.cr

Lepanto, Puntarenas. - Muerto, supuestamente por el disparo que le hizo un cuñado de apellido Villalobos, así acabaron antenoche los días de un cazador apellidado Sibaja, en Balsa de Lepanto, informaron autoridades judiciales de Nicoya.

La Policía rastreaba a Sibaja por presuntamente abusar de sus hijas. La muerte del sospechoso, de 41 años, ocurrió anteayer, a las 5:30 p.m., a 100 metros de su casa, en las faldas de la agreste montaña de Balsa.

Días atrás estuvo a punto de ser capturado a punta de balazos, pero se logró escapar, cuando era perseguido por al menos 25 oficiales de la Fuerza Pública.

Villalobos, tras ser indagado, quedó en libertad sin que se le dictaran medidas cautelares, según fuentes policiales.

Lo buscaron

El ahora occiso era conocido como “Coso el Cazador”.

El martes por la tarde, un hermano suyo, tres amigos y Villalobos lo fueron a buscar para proponerle que se entregara al OIJ.

A cambio, le buscarían un abogado, e incluso existía la opción de retirar la denuncia.

También llegó un hermano de Sibaja y dos amigos de apellidos Ajú y Venegas, este último el dueño y chofer del vehículo en el cual viajaron.

Un testigo, quien pidió no ser identificado, recordó que Sibaja apareció de manera súbita a los pocos minutos de haber llegado desde lo más espeso de la montaña.

“Estaba sin camisa, calzaba botas altas, portaba una carabina 22 y un revólver al cinto de igual calibre”, añadió el informante.

Los hombres bajaron del Toyota Land Cruiser, con excepción de Villalobos. Todo transcurrió con tranquilidad. Se dieron las manos y Sibaja le pidió un cigarrillo a Ajú, quien le dio un paquete.

Fue en ese momento cuando “Coso” notó a Villalobos dentro del vehículo. Lo insultó y comenzó a pedirle que se bajara y que resolvieran el problema como “los hombres”.

El monteador, al parecer, le recriminaba el haberlo denunciado. Villalobos, en ese momento, más bien procuraba colaborar en la solución del problema.

“Coso”, sorpresivamente, comenzó a disparar contra el carro, al tiempo que quienes estaban cerca suyo, corrieron a buscar refugio.

Villalobos, al verse atacado y herido, respondió el fuego.

Publicidad
Publicidad
 
Recomienda esta página a un amig@
Recomienda esta página a un amigo

© 2009. Periódico Al Día. El contenido de aldia.cr no puede ser reproducido, transmitido ni distribuido total o parcialmente sin la autorización previa y por escrito del Periódico Al Día. Si usted necesita mayor información o brindar recomendaciones, escriba a webmaster@aldia.co.cr.