Madrid / AFP y EFE. - De la mano de sus neogalácticos Ronaldo, Kaká y Benzema, el Real Madrid goleó ayer 3-0 al Marsella y dio un gran concierto en el Santiago Bernabéu, en partido de la segunda fecha del grupo C de la Liga de Campeones, que lidera en solitario con puntaje ideal.

El club blanco resolvió el encuentro en los primeros quince minutos de la segunda mitad, en los que llegaron los tres goles del equipo madrileño, obra del portugués Cristiano Ronaldo, en los minutos 58 y en el 64, y del brasileño Kaká, que transformó en el 61 un penal cometido sobre el astro luso.

Pese a lo abultado del resultado a favor del Real Madrid, el partido estuvo igualado en la primera mitad. Al equipo que entrena el chileno Manuel Pellegrini le costó atacar la meta del Marsella, un equipo que se situó muy bien en el Bernabéu durante los primeros 45 minutos.

“Hay una intención, constantemente buscar la portería del rival. En la segunda parte, estuvimos muy superiores. Hicimos un partido muy equilibrado en todos los aspectos. Marsella es un equipo muy fuerte defensivamente. Lo hemos hecho bien tácticamente”, declaró el entrenador merengue Manuel Pellegrini.

Cristiano con esguince

Cristiano Ronaldo abandonó ayer el Bernabéu cojeando ostensiblemente, tras confirmar los médicos del Real Madrid que sufrió una “fuerte contusión con esguince” en su tobillo derecho.

Cristiano se lesionó en la acción que dio fruto al segundo gol del Real, en la jugada en la que fue víctima de un penalti que transformó el brasileño Kaká.

El delantero portugués no pudo acabar el partido y se retiró tras marcar su segundo gol de la noche. Tras la primera revisión médica en los vestuarios del coliseo blanco, se confirmó que sufre un fuerte golpe y un esguince en su tobillo derecho.