Frank Cedeño tiene 15 años de ver como esta zona de San José pasó de ser un sitio seguro a un lugar de mucha violencia.

“Nunca me ha pasado nada, gracias a Dios, pero sí he visto a personas que venden y consumen drogas en la calle a vista y paciencia de todo el mundo”, comentó.

Vecino de Heredia y funcionario del Museo de los Niños, espera que la policía actúe y limpie las calles de “tierra dominicana”.

Cedeño sale de su trabajo en las tardes y camina de prisa para tomar un autobús. “En las noches me dicen que esto es tierra de nadie, hay que llamar un taxi para que lo saquen a uno de aquí”, señaló.

Para Cedeño, el problema de la indigencia es el más serio porque estas personas son las que roban para luego , con lo robado, poder comprar droga y eso se convierte en un círculo vicioso.