Allan Andino
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Colombia fue testigo de la belleza criolla, cuando en setiembre María del Mar Umaña nos representó en Miss Mundo Empresarial, en la ciudad de Bucaramanga.

Aunque la ganadora fue la representante de Brasil, esta herediana no baja la guardia y acumula experiencia para cuando decida lanzarse al Miss Costa Rica.

¿Qué le pareció este certamen?

Fue diferente porque no mide solo belleza, sino la parte intelectual. Los conocimientos de las concursantes sobre la producción de sus países y cómo promocionaría usted la ciudad de donde proviene.

¿Qué hace falta para que el nombre del país sobresalga en el exterior?

Patrocinadores. Cuando fui yo busqué y lastimosamente marcas reconocidas te dan la espalda. A mí me ayudaron tiendas más pequeñas. Es muy triste cuando ves a las otras chicas con vestidos de diseñadores de sus países y no puedes competir contra ellas.

¿Alguna anécdota de Bucaramanga?

Sí, me obligaron a comer hormigas culonas. Así se llaman (dice con pena). Es un símbolo para ellos y había que masticarlas frente a la gente y miembros de la alcaldía. Dicen que son afrodisíacas, saben a maní.

¿Cuál certamen le llama la atención?

Cuando tenga más preparación en cultura general y físicamente, el Miss Costa Rica. Diría que en unos dos años.

¿Qué piensa de las cirugías estéticas?

No me gustan. Es triste que la sociedad te diga que te operes para ganar. Impulsaría la idea que uno tiene que aceptarse como Dios lo hizo.

¿Billetera mata galán?

¡Qué va! No me interesa lo económico. Busco una persona educada y estudiada. Claro que es bueno la estabilidad pero no siempre es lo más importante.

¿Cómo la enamoran?

Me enamora una persona dulce. Que lucha contra todo y no ve conflicto con tal de estar conmigo. Es decir, que no le de miedo.