Ciudad de México/DPA.- Hace días un pistolero del cártel de Juárez declaró que mujeres jóvenes y bellas están siendo reclutadas como asesinas del narcotráfico.

Ha habido traficantes, lavadoras de dinero, madres, amantes, administradoras, vendedoras y reinas de belleza devenidas en esposas. Ninguna ha sido la jefa de jefes, aunque se señala a Enedina Arellano Félix como una figura importante del cártel de Tijuana que comandaron sus hermanos, hoy muertos o detenidos.

Con un halo de seductoras y aguerridas, se han abierto camino varias mujeres como la Reina del Pacífico, Sandra Ávila Beltrán, encarcelada en el 2007 como supuesto enlace del cártel de Sinaloa con narcos colombianos.

Hay libros, canciones y obras de teatro sobre ellas y muchas jovencitas han caído acribilladas, al igual que los hombres, en acciones que se le atribuyen al narcotráfico en Ciudad Juárez.

Y si bien nunca se ha visto a una “mata hari” en plena acción disparando un fusil AK-47, según el sicario Rogelio Amaya, de 27 años, perteneciente al cártel de Juárez, desde hace meses hay mujeres entre los matones del clan.

Según él, son mujeres bonitas y adolescentes de buen ver para engañar más a los contrarios.