Hugo Solano
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“Hay buen viento y en cuestión de horas podría surgir el anuncio de las negociaciones para conformar un bloque de tres partidos de cara a las próximas elecciones”, dijo ayer Francisco Molina, jefe de campaña del PAC al referirse a la posible unión entre su partido, con el PIN y Alianza Patriótica.
En la última encuesta de Demoscopía para Al Día, publicada en diciembre del 2009 el partido Alianza Patriótica de Rolando Araya tenía un 0.3 por ciento de simpatía y el Partido Integración Nacional, encabezado por Walter Muñoz, no se mencionó.
Para el analista político Constantino Urcuyo, esos partidos se dieron cuenta de que cometieron un error al no unirse después del movimiento del TLC. Añadió que ya se les hizo tarde porque las fuerzas se dispersaron.
“El PAC tiene fuerza, pero las otras dos agrupaciones son muy pequeñas. Sin embargo, en esto de política, todo lo que sea sumar es bueno”, acotó.
El PAC podría juntar algunos votos de indecisos que estuvieron contra el TLC, pero ya a estas alturas, la mayoría de la gente está decidida, comentó Urcuyo.
Walter Muñoz, del Partido Integración Nacional, expresó que hasta el momento no hay acuerdo en torno a esa propuesta de varios grupos de la sociedad civil que busca unir esfuerzos contra lo que llaman “un gobierno de extrema derecha”.
Insistió en que más allá de los votos que su partido aportaría a la unión, está la sinergia o la sensación al electorado de que unir esfuerzos les da más réditos que las luchas por separado.
“La unión de hecho da una fuerza electoral para ganar la elección”, dijo Muñoz.
Sobre la designación del candidato, expresó que postulará su nombre aunque la escogencia la deciden los tres candidatos y los partidos respectivos.
Al preguntarle si era algo extemporáneo, comentó que las encuestas que ellos manejan revelan que el gran porcentaje de gente que va a decidir la elección, está indecisa y puede ser que hasta la última semana se definan. “Se puede empatar el partido en el último minuto”, dijo.
Todo debe quedar muy bien estipulado porque sería un gobierno de convergencia. El candidato que se escoja tendría que desligarse de su propia bandera de la presidencia para abajo, añadió.
El decálogo
Se denomina “10 puntos para la victoria del pueblo costarricense” y surgió de grupos civiles en Zarcero.
Dice que el Movimiento Libertario es un falso adversario del Gobierno y que si la tendencia actual no se revierte, ellos (PLN y Libertario) ganarán la presidencia, la mayoría en el Congreso y municipios.
Propone renegociar el TLC, fortalecer el ambiente, impulsar nuevas formas de organización ciudadana.
“Si ustedes no logran la unidad propuesta, serán responsables de que crezca la confusión”, dice el legajo.
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