Alexander Aguilar
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El Zapote Supercross 2010 se despidió anoche del redondel de Zapote con nota baja, por los problemas organizativos que golpearon al evento de las motos.

El inicio de la tercera y última fecha estaba previsto para las 7 p.m., pero en horas de la tarde el Ministerio de Salud clausuró el recinto por falta de permisos.

Esto obligó a que los aficionados que llegaron al Supercross, y los mismos pilotos, tuvieran que esperar más de una hora, hasta que la organización resolvió la situación para autorizarse la apertura de las puertas del redondel de toros.

Otro aspecto que castigó a los pilotos y espectadores es que se encontraron una pista sin mantenimiento, porque desde el miércoles el diseñador de la pista, Víctor Solano, dejó sus funciones en Zapote.

“Desde un principio las cosas no caminaron bien”, señaló anoche Solano en conversación con Al Día. “Los organizadores mostraron falta de experiencia, por eso me fui a media semana, me tenían que pagar una plata y no me la dieron”.

Anoche al cierre de edición no se habían disputado las finales.