Praga, República Checa / EFE.- El escritor y dramaturgo inglés William Shakespeare estuvo en Praga en numerosas ocasiones durante los años en los que al parecer espiaba para Isabel I Tudor, afirmó el historiador estadounidense Vincent Bridges.
“Estoy totalmente convencido de que estuvo en Praga”, dijo Bridges, académico sin título de Carolina del Sur, quien afirmó haber encontrado soporte documental y temático en la propia obra de Shakespeare para apoyar esta tesis.
William Shakespeare (1564-1616), desapareció en 1585 de su ciudad natal, Stratford upon Avon, sin dejar rastro y resurgió en la escena teatral londinense casi una década después.
Procedente de una familia de recusantes católicos, perseguidos por el régimen instaurado tras la Reforma, Shakespeare huyó de su ciudad para evitar problemas con la justicia.
Bridges reconoció que la presencia del bardo en tierras de Bohemia no está documentada, pues no se ha encontrado mención alguna en las crónicas o registros civiles y sólo existe una vaga leyenda que afirma que visitó estos lugares al menos doce veces.
Su hipótesis gira en torno a la posible entrada de Shakespeare en el servicio de espionaje de la reina Isabel I Tudor, a las órdenes de su secretario principal sir Francis Walshingham, quien habría reclutado a sus agentes de entre “un grupo teatral por tratarse de personas válidas para tareas de propaganda y espionaje”.
El estadounidense afirmó que Shakespeare es la misma persona que Francis Garlan, un espía que vivió en el condado de Trebon, al sur de Bohemia, propiedad del excanciller Vilem de Rosemberg.
Sobre los Garlan existen menciones en el diario del alquimista y astrólogo John Dee, quien trabajaba a las órdenes del emperador Rodolfo II de Habsburgo.
Dee, uno de los sabios del siglo XVI, “ayudó en el diseño del Teatro del Globo –donde trabajó el dramaturgo inglés– y el Teatro de la Rosa, y se solapó con Shakespeare durante el auge del teatro isabelino”, afirmó.