Santiago/AFP.- Expertos cuestionan falta de experiencia de la piloto e inadecuada planificación del vuelo como posibles causas de la caída en Chile de un avión militar con 21 personas, mientras el gobierno dice que no es hora de hablar de responsabilidades sino de rescatar los cuerpos.
El avión, un modelo Casa 212 de la Fuerza Aérea de Chile, se estrelló este viernes en el mar luego de que su piloto, la teniente Carolina Fernández, de 26 años, intentara dos aterrizajes fallidos sobre la que es considerada una de las pistas más riesgosas de Chile.
Con sólo 18 metros de ancho, menos de un kilómetro de extensión, acantilados en ambos extremos y sin una torre de control, pilotos han comparado las características de esta pista con la de un portaaviones militar.
Sin embargo, en 40 años y un promedio de 27 aterrizajes por mes, no se habían registrado accidentes en la Robinson Crusoe en medio del Pacífico, a una distancia de 700 km de Chile. El avión no tenía combustible para volver.
El presidente Sebastián Piñera defendió la planificación del vuelo y la Fuerza Aérea dijo que ahora no es el momento de buscar culpables.
