León, México/AP.- Un grupo de jóvenes le dio ayer un regalo muy especial al Papa Benedicto XVI. Cerca del Colegio Miraflores, en el que se hospeda el Pontífice, 25 jóvenes se reunieron a las 5 a.m. para cantarle Las Mañanitas.
“Cantamos con todo nuestro corazón y con toda nuestra fuerza (...) se nos erizaba la piel de cantarle las mañanitas”, comentó María Fernanda de Luna, originaria de Guadalajara.
Los muchachos, que le cantaron desde un callejón cercano al colegio, dieron así una bienvenida similar a la que muchos mexicanos le otorgaban a Juan Pablo II, antecesor de Benedicto XVI, y quien mantuvo una estrecha relación con la feligresía mexicana.
El itinerario papal del sábado incluyó un encuentro en privado con el presidente Felipe Calderón y un saludo a niños en la Plaza de la Paz de Guanajuato.
Benedicto XVI, a punto de cumplir 85 años, inició el sábado sus actividades en la ciudad de León con una misa privada en la capilla del colegio, que lo albergará durante las tres noches que pernoctará en el país.
Polémica presente
El segundo día del Papa en México, coincidió con el lanzamiento de un libro que contiene documentos sobre el presunto encubrimiento del Vaticano a abusos sexuales cometidos contra seminaristas por el fundador de los Legionarios de Cristo.
Alberto Athié, exsacerdote y uno de los tres coautores del libro “La voluntad de no saber”, aseguró ayer que con la divulgación del texto, en la misma ciudad en la que se hospeda el Pontífice, no se busca boicotear la visita, pero sí pedirle que reconozca la responsabilidad del Vaticano y de él mismo por, presuntamente, haber protegido durante décadas a Maciel. En rueda de prensa desde León, Guanajuato, Athié dijo que “con un reconocimiento público de su responsabilidad... no se va a caer la Iglesia; al contrario, se va a reconstruir”.
Después de México, el Papa viajará el lunes a Cuba.
