Nacionales
Domingo 4 de noviembre de 2012, Costa Rica

Cosas de la vida

Cucarachas sin pata, pueden caminar

Ana Coralia Fernández Arias, periodista

ana.fernandez@aldia.co.cr

“La cucaracha, la cucaracha, ya no puede caminar, porque no tiene, porque le falta una pata para andar...”.

El clásico corrido mexicano, sujeto a múltiples interpretaciones, en su sentido literal propone una sentencia que hoy por hoy resulta ser falsa. La cucaracha aún sin una pata camina, porque tiene el secreto de los secretos para sobrevivir: se adapta.

En los ambientes más inhóspitos y en los óptimos, en las épocas más antiguas y hasta en el espacio (el caso de la cucaracha Nadezha que después de haber sido lanzada al espacio en un experimento, volvió a la Tierra con 33 crías nacidas en órbita), estos insectos asombrosos y repugnantes, nos dan toda una cátedra de adaptación y resistencia.

Por diminutas que sean, donde se aparezcan, desatarán los más agudos gritos, los más estruendosos chancletazos y nos dejarán atónitos con su indiferencia ante los adelantos de nuestra tecnológica y avanzada sociedad.

Para ellas todo se reduce a un nicho para vivir y a comida. Lo demás es muy complicado.

Traigo el tema a este espacio porque en estos días en que el país, las organizaciones y la gente se debaten entre un modo de hacer las cosas y otro, polémica que también despierta los más encarecidos debates en lo político, en lo productivo, en lo laboral, la filosofía de las cucarachas da una lección dura y clara: adáptese y sobreviva / resístase y muera.

Son tiempos de un cambio vertiginoso que se gesta en una vorágine de datos, circunstancias y tendencias.

Los dinosaurios no lo lograron. Las cucarachas ahí están.