Esteban Rojas Sáurez
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El negocio comenzó a la orilla de la calle en La Garita de Alajuela vendiendo frutas y algunos elotes cocinados a los que se le sumaron las famosas chorreadas y las tortillas de queso.

Jorge Chinchilla y su esposa Victoria Amador, son los dueños del famoso negocio.

Ellos aseguran que la crisis no existe y que, con empeño y trabajo, las empresas familiares pueden salir adelante.

Don Jorge espera que Ottón Solís, cliente frecuente del negocio, sea quien gane las próximas elecciones presidenciales.

¿Cómo empezó el negocio?

Este local era pequeño, pero comenzamos en la calle vendiendo frutas y verduras. Con el padre de mi esposa plantamos una milpa, casi un cuarto de manzana y nos pusimos a vender elotes cocinados en medio de las frutas.

¿Cuál fue la reacción de la gente?

Eso fue como darle una pedrada a un panal. Se llenó y hasta la fecha al local siempre viene mucha gente.

¿Qué les decían?

Que por qué no hacíamos otras cosas y así fue como vino la idea de hacer tamal de elote, chorreadas en unas cocinas muy pequeñas que teníamos de canfín. Lo que hacíamos era moler el maíz con máquinas manuales. Empezamos con dos y al final terminamos con 20.

¿De dónde sacan el maíz?

De todo el país, hay un señor en Guápiles que produce sólo para nosotros.

¿Cuánto maíz gastan en una semana?

Ahora estamos en temporada baja. Estamos gastando en promedio 10 mil elotes en una semana. En temporada alta son un poco más de 15 mil.

¿Qué es lo que más busca la gente?

Las chorreadas y ahora las tortillas de queso que les encantan. Aquí todo el año tenemos tamales de cerdo, chicharrones de carne y de panzada.

¿Cuántas personas trabajan en la Fiesta del Maíz?

Son como unas 50. Mis hijos están metidos aquí. El mayor tiene una fábrica de bizcochos que hace el negocio más interesante y además hacemos suspiros.

¿Qué es lo mejor de trabajar con la familia?

Es lo más lindo porque todos se preocupan y salen buenas ideas como esa de la fábrica del bizcochos y la de hacer suspiros.

¿En cuánto compraron el terreno donde está el negocio?

En ¢15 mil. Mi suegra me dio ¢6 mil, mi mamá ¢4 mil y yo conseguí otros ¢5 mil. Le di ¢10 mil de prima y el resto se lo dimos después.

En el año 73, Victoria pegó unos pedacitos de “la navideña” y los invertimos en el negocio.

¿Los fines de semana se pone a reventar?

Sí y también los viernes por la noche con la gente que va de paseo para la playa.

¿Cuáles personajes han pasado por aquí?

Son muchos: Karen Olsen de Figueres, Miguel Ángel Rodríguez, Rafael Ángel Calderón, José María Figueres, Rolando Araya y los muchachos de Pelando el ojo. Uno que pasa a menudo por aquí es Ottón Solís porque le gustan las chorreadas.

Hablando de políticos... ¿Por quién se inclina para que gobierne el país?

Me gusta Ottón, pero me duele la desintegración que se ve dentro de su partido porque siento que se está dividiendo. Me gustaba más como estaba el partido antes, era más unido.

¿Qué piensa de la crisis?

Eso no existe. Siento que detrás de esa palabra hay muchas mentiras. Si trabajamos, Dios nos ayuda. Nosotros le damos trabajo a mucha gente que está contenta y tranquila.

¿Qué le hace falta al país para salir adelante?

Más trabajo, que todos trabajemos, más empresas y más créditos para que la gente pueda sacar préstamos para los negocios.

Al mando

Edad: 66 años.

Hijos: Cuatro.

Dato: Don Jorge y doña Victoria tienen 44 años de casados y son los fundadores de la Fiesta del Maíz. Sus hijos también trabajan en este lugar haciendo próspera a la empresa.