Una conserje muy alegre, dicharachera y algo chismosa, pero en la que se centra la historia principal de la comedia “Se nos perdió el difunto”, es el papel que interpreta la actriz Carmen Chinchilla.
Con más de 20 años de hacer teatro la artista repite en la obra el papel que interpretó cuando la puesta en escena estuvo hace ya algunos años en el teatro Lucho Barahona. Ella y Mauricio Astorga fueron quienes decidieron revivirla hace dos meses.
“Doña Flory es la típica conserje que hay en todas las oficinas, todo el mundo la conoce y le cae bien a todos, ella es la que encuentra al muerto y llama a la policía. Cuando llega la policía hasta se mete en la investigación, además se encuentra con que el detective es un exnovio suyo” contó.
Chinchilla quien inició su carrera en el Taller Nacional de Teatro, contó que la pasión por las tablas llegó cuando apenas tenía cinco años.
Recordó que una vez fue con su madre a ver una obra en la antigua biblioteca Carmen Lyra, ubicada bajo el kiosco del Parque Central y vio a una muchacha haciendo un monólogo sobre los volcanes.
“Le dije a mi mamá que eso era lo que yo quería hacer, de ahí en adelante cualquier cosa que se pareciera a teatro yo lo hacía”, recordó Chinchilla quien además es profesora de inglés y estudia Derecho.
Lo que más le gusta del teatro es que este le permite a los adultos seguir jugando.
“Se puede jugar a ser una doctora, una conserje y entre más ganas le pongas a ese juego la gente lo va a creer más”.
Aún recuerda que su primer papel fue el de una adolescente de 15 años en la obra “Prohibido hablar de sexo” y confesó que le gustaría algún día hacer algo de drama.
