Puntarenas. - Flor Ríos Campos, de 33 años, fue encontrada ayer culpable de haber asfixiado a su bebé recién nacido, por lo que el Tribunal Penal de Puntarenas le impuso 30 años de prisión por homicidio calificado.
La resolución fue leída ayer a la 1:30 p.m. por el juez Leonardo Pereira, quien indicó que fueron vitales los testimonios recabados durante el debate.
El representante del Ministerio Público, Hernán Moya, había solicitado horas antes que se le dictaran 35 años de prisión.
Mientras escuchaba el fallo en su contra, Ríos solo atinó a taparse el rostro con su cabello, sin mostrar algún arrepentimiento.
La patóloga forense Mayela Valerio afirmó durante, una videoconferencia, hace 15 días, que el niño había sido asfixiado debido a que presentaba moretes en el cuello. También presentó un golpe leve en la cabeza.
La experta se basó en que el cuerpo del menor tenía 12 horas de fallecido, por lo que quedó demostrado que no nació muerto. El infante respiró por un corto período antes de ser estrangulado por su propia madre.
También brindó testimonio un paramédico de una empresa privada que atendió a la mujer. Señaló que trasladó a Ríos hasta la clínica de Paquera, pero que nunca observó al bebé.
Los hechos se remontan al 20 de marzo del 2011 en Santa Teresa de Cóbano, luego de que Ríos dio a luz dentro de una vivienda.
Tras allanar la casa de Ríos, el OIJ encontró el cuerpo dentro de una bolsa de plástico, a escasos metros de una cama.
Luego del alumbramiento, Ríos presentó una severa hemorragia, por lo que fue trasladada hasta el hospital Monseñor Víctor Manuel Sanabria de Puntarenas, donde fue detenida tras ser dada de alta.
* Colaboró Carlos Láscarez.
