Sobre el terreno de juego

Dirigencia de Herediano me sorprendió

En lo personal pienso que lo he visto todo en el fútbol y casi nada puede sorprenderme. Pero los comentarios de los dirigentes del fútbol tienen la enorme capacidad de sorprenderme, tanto por su infinita ignorancia, como por su poca capacidad de análisis. Escuché a directivos heredianos hablar sobre el mal planteamiento de Heredia en Pérez Zeledón.

Dicen que fue malo; pero ¿por qué? ¿Qué tuvo de malo? ¿Qué alguien me explique específicamente en qué se falló? No me vengan con eso, es muy difícil que un equipo de jerarquía pierda una ventaja de tres goles en una final de dos partidos, al margen del planteamiento táctico. Si un equipo con jerarquía iniciado un partido es consciente que el planteamiento está errado, los líderes dentro de la cancha lo cambian y ya está, después le explican al técnico las razones y todo arreglado.

Pero Herediano no es un equipo de jerarquía y no porque no tenga jugadores de calidad, porque si los tiene; pero es un equipo nuevo, con futbolistas que aún no tienen el roce que les permita tomar ese tipo de decisiones. Nunca ha sido mi costumbre, ni como jugador ni como comentarista juzgar el desempeño de un futbolista y menos de un portero, porque todos los arqueros hemos tenido partidos para el olvido; como es el caso de De Lemos el domingo.

Para él fue una mala tarde, falló en dos goles, repito yo también me comí goles malos. Los dirigentes debieron haber visto al menos ese detallito y reflexionar que si De Lemos hubiera jugado al nivel que nos tiene acostumbrados, Herediano posiblemente estaría en semifinales y nadie hablaría de planteamientos erróneos, ni esas estupideces.

Pero como el Señor Carlos Watson es un caballero en todo el sentido de la palabra, que no sale a la prensa diciendo que perdieron por una mala tarde del arquero, entonces se come la bronca solo y los dirigentes destituyen un técnico que está formando un equipo para que su trabajo venga y lo capitalice otro.