Falleció nicaragüense baleado en Tirrases

“Solo vino a morir aquí”

El nicaragüense Randal López Valladares, de 23 años, falleció antenoche, tras recibir un disparo en la espalda, luego de intervenir en una disputa en Urbanización La Ponderosa de Tirrases, Curridabat.

Según su hermano, José López, él vino de visita hace tres meses y volvería a su país este mismo mes. Trabajaba en un Lavacar en La Colina de Curridabat.

Según vecinos de la pulpería “J y J”, frente a la cual se desarrollaron los hechos, todo inició porque una mujer llegó a reclamar que le habían agredido a su hijo.

Estaba en eso, cuando otras mujeres llegaron a golpearla y la tiraron contra el piso. Al ver que agredían a una conocida suya, Randal salió a defenderla, al parecer con un machete, por lo que uno del otro bando le disparó, hiriéndolo mortalmente.

Cuando la policía y la Cruz Roja llegaron, estaban en la escena el agonizante y la mujer agredida, los demás se escondieron en el caserío y comenzaron a tirar piedras a los cruzrojistas.

Algunos testigos dijeron a las autoridades que el disparo lo habría provocado un sujeto conocido como “Taz”, miembro de una banda denominada la “Jimmy”, integrada por unos 20 miembros de todas las edades.

Según Gerardo Palacios, oficial que tiene seis años de patrullar la zona, algunos miembros de esa banda se dedican a la venta de crack y marihuana, y a otros se les investiga por varios robos y asaltos en Curridabat.

Randal López será sepultado hoy en Nicaragua, donde viven su mamá, su hija de tres años y dos hermanas, de doce y tres años. Según su hermano, sólo vino a morir aquí.

Para la policía, Tirrases es uno de los lugares más difíciles.