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 Internacionales Domingo 12 de noviembre, 2006, San José, Costa Rica.
 

Drama en Colombia se resolvió gracias al ADN

Hombres fueron cambiados de familia al nacer

A uno le tocaba ser pobre y al otro vivir como rico

Colombia / EFE y AFP.- Una prueba de ADN reveló un error cometido hace 29 años en un hospital de Colombia, donde dos bebés fueron cambiados y entregados a madres equivocadas, reveló esta semana un abogado que representa a ambas familias en una demanda contra el centro médico.

El caso se presentó en octubre de 1977, cuando María de Zubiría y Cándida del Río ingresaron al hospital de Bocagrande, en la ciudad de Cartagena (norte), con un día de diferencia para alumbrar a sus hijos.

Tras el parto, De Zubiría pidió que se le practicara una circuncisión a su bebé, a quien bautizó Carlos Mario, pero al regresar a casa descubrió que el niño no tenía cicatrices de la operación.

El pediatra encargado del procedimiento le dijo a la madre que no era el niño a quien había intervenido, pero la clínica la convenció de lo contrario, argumentando que el médico se había equivocado al operar a otro bebé. La confundida mujer creyó la historia del hospital.

Los dos son mis hijos, ambos son la felicidad de la familia. Lamento mucho que Cándida no haya podido superar esto. Pero ahora las dos familias debemos estar unidas. Ambas madres ganamos un hijo más”.

María de Zubiría, afectada.

“Imagínense todo el dolor que deben sentir estas dos familias al saber que no criaron a sus verdaderos hijos, que no estuvieron ahí con ellos en los momentos difíciles de sus vidas”

Luis Enrique Llamas, abogado de ambas familias.

Hospital tenso

La gerencia del hospital asegura que lamenta mucho lo sucedido, pero teme que el pago de indemnizaciones los lleve a la quiebra.

Carlos Mario Eastor de Zubiría vivió desde entonces en un hogar con comodidades en Cartagena, mientras Ramsis Puello, el otro niño, creció en la localidad vecina de Turbaco, con muchas dificultades económicas.

La sangre “jala”

La equivocación fue descubierta por la fisioterapeuta Mercedes García, amiga y vecina de toda la vida de la familia Puello, quien, por motivos de trabajo, conoció a una hija de María de Zubiría y, al ver parecido con su amigo, le entabló una conversación, durante la cual surgieron demasiadas coincidencias.

“Quiero que conozcas a unas personas que creo que son tu familia de sangre”, le dijo al joven Ramsis, según relata el diario El Tiempo, de Colombia.

La publicación indica que él, algo incrédulo, acudió junto a su vecina a la casa de sus padres biológicos. La primera familiar que vio fue a una prima blanca, de ojos azules como él.

“Ustedes se parecen, ¿sí o no?”, les dijo Mercedes.

Ramsis, intrigado, le dijo a Mercedes que quería conocer a la que ella decía que era su mamá biológica.

“Cuando la vio se impactó y sí creyó que eran madre e hijo”, contó la fisioterapeuta a El Tiempo.

Ambos se contaron sus historias y coincidían en el hospital, el mes, los parecidos físicos... Fue ahí cuando comenzó a revelarse la verdad del error en el hospital de Bocagrande, que cruzó las vidas de Ramsis y Carlos Mario.

María no tuvo dudas y lo asimiló, pues nunca se sintió completamente satisfecha con el malentendido del hospital.

Poco tiempo después de conocer a Ramsis, habló con su hijo de crianza, Carlos Mario, a quien le contó lo que había pasado. Él solo respondía que no lo podía creer.

El diario indica que fue un encuentro entre los dos jóvenes lo que aumentó las sospechas, que quedaron despejadas por completo con una prueba de ADN realizada hace un mes, tras la cual las dos familias entablaron una demanda contra el hospital por lo que, según el abogado, constituyó un “perjuicio moral irreparable para todos”.

Los abogados de las dos familias piden una indemnización de más de un millón de dólares.

Aceptación a medias

Las víctimas de la equivocación ahora se tienen gran cariño y solidaridad.

“Viví afortunadamente engañada y feliz ” , dijo María.

En cambio, la madre de crianza Ramsis Puello, Cándida, no tomó tan bien el desenlace y, según sus allegados, “casi se muere ” y ha perdido varios kilos.

Ambas familias le comentaron a los medios colombianos que cuando Carlos y Ramsis eran bebés se habían resistido a aceptar las diferencias marcadas de sus rasgos físicos.

Por ejemplo a Ramsis, para tranquilizarlo, le dijeron que su bisabuela era rubia; los padres de Carlos Mario se convencieron a sí mismos de que el bebé era un Estor de Zubiría porque después de escrutar al niño de pies a cabeza le encontraron un lunar en la espalda que, supuestamente, tienen muchos de la familia Estor.

No cambiarán familia

“Viví una infancia feliz, con las dificultades normales de todo el mundo, pero hubiera preferido estar con mi padre biológico y mi madre biológica ” , indicó Ramsis Puello, que debería llevar los apellidos Estor de Zubiría.

Puello, que está por terminar sus estudios de Derecho en Cartagena, declaro optimista que ahora tiene “dos papás y dos mamás”. Carlos Mario al conocer a Ramsis le dijo que físicamente era igual que su madre.

Ambos le aseguraron a El Tiempo que aunque después de 29 años descubrieron que fueron cambiados al momento de nacer, ninguno quiere intentar una vida con sus padres biológicos.

Carlos Mario, que de no haber ido al hogar equivocado habría crecido con los Puello del Río, admite que conocer a la mujer que lo trajo al mundo fue una gran alegría, pero no se ve viviendo con ella en Turbaco.

“Somos de mundos distintos, la vida es así”, afirma.

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