San Pedro de Montes de Oca

Policía fulminó a asaltantes de la sucursal de Amnet

Llamada al 911 y rápida acción de las autoridades obligó a delincuentes a entregarse

San Pedro.- La rápida alerta de un testigo que, a riesgo de su propia vida, llamó ayer al servicio 911, a las 1:02 p.m., desde la oficina de Amnet y la casi inmediata respuesta policial a ese llamado de auxilio, frustraron un asalto a mano armada en esa empresa.

La policía irrumpió en el lugar en dos minutos, aisló a los antisociales y, después de algunas negociaciones evitó el robo, desarmó a los ladrones y rescató ilesos a los cuatro retenidos en Amnet.

Los tres asaltantes de apellidos Morales, Miranda y Ramírez entraron como clientes y redujeron a la impotencia al guarda y lo despojaron del revólver calibre 38.

De seguido cerraron la puerta principal y encañonaron al oficial y a dos empleadas, un hombre y una mujer, quienes estuvieron durante más de dos horas en manos de sus captores, informó ayer Rafael Gutiérrez, viceministro de Seguridad.

El empleado que alertó al sistema de emergencia 911, tomaba café en un pequeño cuarto de la sucursal y cuando se percató de lo que sucedía se escondió debajo de un escritorio para llamar. Esto hizo posible que en dos minutos se diera el cierre total de la carretera que va a la fuente de la Hispanidad y a la rotonda de Zapote.

Los hombres llegaron a la empresa de cable en un automóvil Honda Accord que dejaron a 100 metros de Amnet. Portaban un revólver calibre 38 y un puñal, que luego aparecieron en un patio. Además de la 38 que le arrebataron al guarda de Amnet.

Durante el operativo, el OIJ pidió a las televisoras que dejaran de transmitir, ya que los delincuentes observaban con detalle todos los pormenores.

Otro aspecto que cuidaron las autoridades, fue el resguardo de un albergue ubicado a la par de empresa, ya que ahí viven varios menores y no descartaban que se pudieran enfrentar a balazos.

Conforme transcurrió el tiempo, los captores desistieron de sus planes de robo y retención, por lo que primero liberaron al guarda, esposado con las manos hacia atrás, y luego a una de las mujeres, quien gritó a los agentes que no dispararan, pues los hombres estaban dispuestos a entregarse.

Primero salió Morales, de nacionalidad dominicana, quien salió de la cárcel de San Sebastián hace tres meses, donde estuvo descontando una pena por robo agravado.

Miranda, costarricense, llevaba pocas horas de haber abandonado un centro de confianza en Guadalupe, sitio del que salía cada sábado y al que debe regresar todos los lunes. El tercer detenido, tico de apellido Ramírez, ha sido investigado por el robo de computadoras personales y celulares en Hatillo.