Vecinos tras millones

La policía anda tras otros miembros de la banda que secuestró a Sonia Cordero y a su hija, Mónica Ugalde en Río Jiménez de Guácimo. Actualmente hay cuatro detenidos, de los cuales tres son de la zona y uno de la localidad de Pocora.

Uno de los detenidos era un taxista pirata, casado y con hijos. Su familia quedó desamparada, ya que él era el que aportaba dinero.

Otro de los integrantes, un nicaragüense con un amplio expediente judicial, era la cabecilla de los secuestradores. Se le atribuyen asaltos a camiones repartidores y a empresas locales.

De los otros dos, la policía no quiso dar mayores datos. Uno trabajaría en un negocio de Río Jiménez y el otro es de Pocora. Al parecer, los otros cómplices son de Hatillo. Se presume que también hay gente de San José involucrada.

Los secuestradores querían repartirse ¢100 millones, suma pedida por la liberación de la niña.

De ser encontrados culpables del delito de secuestro agravado, podrían enfrentar una pena de 20 años.