Madrugada de ayer en inmediaciones del centro comercial El Pueblo

Defendió a taxista y lo mataron de 4 balazos

En el carro de los homicidas se hallaron tres armas y 100 balas

Calle Blancos - El deseo de ayudar a un taxista que aparentemente estaba peleando con varios hombres, hizo que Alejandro Durán Gómez, de 22 años, fuera asesinado ayer de cuatro balazos cerca del centro comercial El Pueblo, en Calle Blancos.

El homicidio ocurrió, a las 4:30 a.m., en una de las calles aledañas, luego de que Durán observó la situación e intentó calmar los ánimos.

Uno de los agresores baleó en los pies a Durán, que había llegado al lugar acompañado de una amiga.

Después, cuando la víctima hizo el intento de devolverse, recibió otros tres balazos que lo impactaron en la espalda, y que le causaron la muerte casi instantánea, según las declaraciones brindadas por varios testigos.

Como principales sospechosos del homicidio figuran tres hombres que viajaban en un pick up Nissan D-21, y que habían dejado estacionado en un parqueo situado frente al centro comercial.

Luego de recabar algunos testimonios, la policía logró detener a dos hombres apellidados Salazar, de 20 años, y Guillén, quien no portaba cédula de identidad.

Un tercer sospechoso se dio a la fuga, aprovechando que se hizo un gran tumulto, ya que los clientes de varios negocios salieron a la calle para observar qué había sucedido.

Dentro del vehículo de los sospechosos, los agentes judiciales hallaron dos armas, 9 milímetros, y una pistola Beretta, supuestamente de la policía, pues tenía lijado su número de serie.

Además, se encontraron 100 proyectiles de arma, 9 milímetros, y tres cargadores, informó ayer Wálter Valerín, de la Fuerza Pública de Goicoechea.

“Auxilio, lo mataron”

A las 5 a.m., los gritos de la muchacha que acompañaba a la víctima, anunciando que habían matado a Durán, despertaron a varios vecinos de Hatillo.

Pablo Gómez, tío del joven asesinado, comentó que su sobrino vivía en esa localidad, en compañía de su abuelo, después de que, años atrás, sufrió la pérdida de sus padres.

“Trabajaba en una empresa de semillas de la familia. La muchacha con la que había salido era una amiga de años que vivía cerca de la casa. Habían ido a El Pueblo después de haber estado en un bar de San Pedro”, dijo Gómez con gran consternación.

Agregó que Durán venía recuperándose de varios problemas, y que la riña de que fue víctima, podría haber sido por los celos de alguno de los sospechosos, debido a una relación que había tenido Durán con una mujer.