Ayer a las 5 p.m. le colocaron candados

Relleno Río Azul es historia

Basura pasará a La Carpio y en unas semanas al sector de Aserrí

A partir de hoy las 500 toneladas de basura que a diario entraban a Río Azul, viajarán a la Carpio y en 15 días, también se depositarían en el relleno de Aserrí, que aún no opera.

El director ejecutivo de la Federación de Municipalidades de la Región Este (FEDEMUR), Alexis Cervantes, explicó que el cierre se llevó a cabo por orden del Ministerio de Salud.

“El cierre lo hacemos bajo protesta, porque todavía faltan muchas cosas por hacer, en cuanto a los gases y los terrenos”, señaló Cervantes.

Según la ministra de Salud, María Luisa Ávila, se llevará a cabo el cierre técnico de Río Azul, junto con una unidad ejecutora. Además, una empresa se encargará de completar los trabajos.

“Lo más seguro es que vamos a contratar a WPP, compañía que tiene mucha experiencia en este tipo de trabajos”, comentó Ávila.

La jerarca aseguró que para poder construir un parque en la zona donde se encuentra el relleno, tendrán que esperar por lo menos 25 años.

Además, aseguró que se manejan informaciones de que grupos de precaristas podrían ingresar a Río Azul, “Ya estamos tomando las medidas de precaución con el Ministerio de Seguridad, para desalojar a cualquier persona que quiera instalarse en este lugar”.

¿Y los “buzos”?

Los 85 “buzos” que trabajaban en Río Azul buscando material reciclable en medio de la basura, protestaron por el cierre. Los trabajadores se presentaron con pancartas pidiendo que el IMAS y Salud cumplan las promesas de ayuda.

Según la ministra Ávila, los “buzos” no quisieron capacitarse en el INA para conseguir otros trabajos.

Pero ellos aseguran que intentaron reunirse con la funcionaria en varias ocasiones, sin embargo, la Ministra no los atendió.

¿Y ahora de qué vamos a vivir? Máximo estaba muy preocupado ayer por el cierre del botadero. Manuel Vega Esa es la pregunta que se hacen los 85 “buzos” que hasta ayer trabajaron en el relleno de Río Azul. Máximo Castellón tenía más de 10 años de hurgar en el mar de basura del relleno. “Aquí la mayoría nos dedicamos al reciclaje, pero ahora nos están quitando el sustento de nuestras familias”, comentó preocupado. Al igual que Máximo, Marvin Jarquín tiene 10 años de buscar entre la basura materiales como aluminio y cobre, de donde saca el dinero para mantener a sus dos hijos. “Ahora que nos cierran el botadero no sé cómo vamos a sobrevivir. Sólo le pedimos a Dios que nos ayude, porque el IMAS nos ofreció apoyo pero no han regresado”, señaló Marvin. Los “recuperadores” aseguran que el IMAS y el Gobierno ofreció ayuda para que salieran adelante, pero afirman que las promesas no se han cumplido. “Estamos esperando que se concreten”, comentaron.