Infantil peruano perdió casa por terremoto y unas primas murieron

Le escondieron la tragedia

Lima / DPA. - A Jairo Hernández, baluarte de la defensa en la selección peruana de fútbol que participa en el Mundial Sub 17 de Corea del Sur, le ocultaron la verdad durante una semana. Pero ahora “Muchachito” sabrá que su casa en Pisco se cayó por el terremoto y que unas primas murieron.

“A mi hijito le hemos dicho que estamos bien, pero la verdad es otra. No le hemos dicho la verdad para que no se deprima y afecte su rendimiento en el Mundial”, le dijo al diario “Ojo” la madre del jugador, Martha Moquillaza.

Mientras Hernández creía en Corea que todo estaba bien, lo cierto era que sus padres y hermanos estaban refugiados en Lima, en la casa de un compañero suyo de selección, Juan Zevallos.

Ahora, después de que la familia decidiera revelar su drama ante periodistas, el zaguero inevitablemente se enterará. “Jairo, hijo mío, ahora que sabes la verdad, quiero que seas fuerte. No te doblegues, carajo”, fue el mensaje que le transmitió su madre.

El terremoto también afectó a jugadores de la selección mayor. El caso más conocido es el de John Galliquio, quien desistió de jugar el partido amistoso de anoche contra Costa Rica, al enterarse de que la casa en que viven su esposa y sus tres hijos en Pisco se derrumbó, aunque todos sobrevivieron. Pedro García sí viajó, pese a que familiares suyos pasan las noches en un autobús.