Piden 6 años de prisión para Fiscal suspendida

Llora sin consuelo, pero Fiscalía no perdona a Zulay

La acusan de encubrir a Burgos y ayudarlo

Zulay Rojas rompió en llanto ayer cuando escuchó las conclusiones del fiscal Cristian Ulate, quien la acusó de haber ayudado a Luis Fernando Burgos para que no dejara evidencia del crimen de su esposa Maureen Hidalgo.

Ulate pidió a las juezas que se condene a Rojas a seis años de prisión por un delito de incumplimiento de deberes, dos delitos de favorecimiento personal y otro de favorecimiento real.

Pese a que lloró durante la mayor parte de la exposición del Ministerio Público, Rojas no pidió que se interrumpiera el debate.

Apoyado en los rastreos telefónicos, el Fiscal dijo que Zulay supo por boca de Burgos, la tarde del 11 de julio del 2006, que supuestamente había matado a su esposa, sin embargo, ella en vez de denunciarlo lo encubrió y le dio consejos sobre cómo envolver el cuerpo.

El representante del Ministerio Público calificó la actuación de Zulay como “maliciosa, malintencionada y dolosa”.

“Al quedarse callada no se pudo encontrar el cuerpo de Maureen en la casa del imputado Burgos”, expresó el Fiscal.

Ulate aseguró que es falso que Rojas sufriera el síndrome de estrés postraumático, como argumentó su psiquiatra Gioconda Batres, y que eso le impidiera contar lo que sabía.

“Batres vino aquí a justificar a su cliente, su valoración no fue objetiva”, añadió el funcionario.

Para Ulate, pudo más la amistad que Zulay tenía con Burgos, que sus propios deberes como Fiscal del Poder Judicial o su relación con Maureen.

En horas de la tarde, Henry Vega, uno de los abogados de la familia de Maureen, hizo sus conclusiones en las que pidió 35 años de prisión para Burgos, al que calificó como un “cobarde y cínico”.