Allan Andino
aandino@aldia.co.cr

Las provocativas curvas de una moraviana tendrán con los ojos bien abiertos a miles de salvadoreños, cuando su atractiva figura se multiplique sobre vallas, “mupis”, buses y otros medios de publicidad.

La modelo nacional Andrea Leiva fue seleccionada para ilustrar la campaña de la colonia para caballero “Jockey Club”, en el país cuzcatleco, con una alta dosis de sensualidad.

¿En qué consiste esta campaña?

Soy la imagen de una colonia para hombre. El concepto es así, tipo vaquero, que atrae a las mujeres, ahí entro yo. La campaña es solo para El Salvador y consta de vallas, ‘mupis’, buses, publicidad por todo lado para el perfume. Durará seis meses en la calle.

¿Hace cuánto se hicieron las fotografías y dónde?

Hace poquito, como un mes, y las fotos se tomaron aquí.

¿Qué le pareció el resultado?

Muy profesional, no lo veo como morbo ni vulgar, no afecta mi imagen en lo absoluto. Me gusta la fotografía y es algo que me abre más puertas afuera.

No es la primera vez que sale como vaquerita, ¿esa imagen la persigue en los eventos?

(Risas) Trabajo mucho con temas relacionados a ese ambiente, rodeos y eso. Coincido mucho con trabajos así, es más, el sábado pasado me tocó ir al tope de Alajuela vestida de vaquera.

¿Sabe montar?

Sí claro. Me fascinan los caballos. Me gusta montar y cuando tengo la oportunidad lo hago. Aprendí desde chiquita porque antes en la familia teníamos, hasta clases llevé. Me han botado y todo, pero nada grave.

En las fotos se muestra como una chica ruda, ¿es así en realidad?

No, no me considero una chica ruda, soy tranquila, normal. Sí un poquito seria, pero ruda no. Solo en las fotos porque era lo que tenía que reflejar para el cliente.

¿Cuánto se gana por un trabajo como éste?

No le voy a decir cuánto exactamente, pero sí pagan bien, estamos hablando de seis meses de imagen. Es un trabajo que disfruto, me encanta la fotografía.

A excepción de la revista SoHo, usted exponía su imagen con un tono más conservador. Aquí sale muy provocativa, ¿a qué se debió el cambio?

Bueno me pareció algo muy profesional, bonito, es una imagen para un perfume, no es nada vulgar. Son fotos muy sexys, pero no salgo desnuda tampoco. Me pareció una buena opción.

¿Se considera sensual?

Pues qué te diré. Digamos que sí (risas). Tengo que serlo para poder hacer fotos así.

De operaciones, ¿tiene alguna? Si es así, ¿se haría otra?

¿Cirugías? ¿cuáles? (bromea). Sí tengo una, la que se hace la mayoría de las mujeres en el pecho. Y si lo necesitara en algún futuro me haría otra, porque estoy completamente de acuerdo. Por ahora, me siento bien así como estoy.

En un día cualquiera, ¿le gusta llamar la atención?

¡Cero! Si usted viera. Soy supersencilla, en fachas, a veces me topo amigos y me dicen: “diay, ¿qué le pasó?” Soy de andar en buzo, en gorras, sin maquillaje, así voy a la “U”. La gente piensa que uno anda de pies a cabeza siempre “entaconada” y no.

Con espuela

Tiene 24 años. Es estudiante de administración de empresas, 1,68 metros de estatura y medidas 87-63-88.

No es la primera vez que hace trabajos fuera del país. En Guatemala protagonizó dos calendarios, uno para una marca de ron, y otro para una de herramientas.

La marca le pagó cerca de mil dólares por derechos de imagen. Es probable que viaje a El Salvador para promocionar la colonia.