Juan Diego Villarreal
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Rodrigo Rodríguez leía Al Día en su taxi, el lunes por la mañana, cuando se dio cuenta que Liberia había dejado olvidada una malla con los balones del equipo, antes del juego frente a Alajuelense que terminó 1-1.

Por curiosidad, abrió la cajuela de su vehículo y para su sorpresa los balones estaban allí. Inmediatamente llamó a la dirigencia pampera para devolverlos.

“El domingo por casualidad pasaba por el hotel Torremolinos y me hicieron parada. Lleve al técnico Carlos Restrepo y otras personas al estadio”, dijo el taxista.

“Cuando se bajaron escuché que cerraron la “joroba”, pero fue hasta el día siguiente cuando leí Al Día que me di cuenta que los habían dejado en mi taxi; entonces llamé y los devolví al hermano del gerente del club”.

Rodríguez, con más de 20 años laborando en la “Fuerza Roja” añadió: “Siempre se dicen cosas de los taxistas, pero somos muy honrados y trabajadores”.