Rincón arbitral

Lo que no se debe hacer con el pito

Que un árbitro sea nombrado dos veces en la misma fecha y que tenga tres nombramientos solo en dos jornadas, deja de manifiesto los males de la Comisión, reflejados en el arbitraje.

Si la Comisión no camina bien, menos el arbitraje, de allí que observemos tanto error en los partidos.

Uno de ellos es la falta de concentración de los asistentes y de los centrales. Pues bien, igual le pasa a la Comisión en cuanto a los nombramientos, como lo señalé anteriormente.

Es preocupante observar los errores en los fuera de juego. El asistente no se concentra y marca la sanción en el momento en que el jugador recibe el balón y no cuando se lo sirven.

Eso se reflejó tanto en el juego Cartaginés - Puntarenas como en el Saprissa - San Carlos, invalidándose al equipo sancarleño un gol clarísimo, por un señalamiento erróneo del árbitro asistente.

Pero la verdad, esta jornada empezó mal desde el miércoles: Vinicio Mena amonestó al jugador Evans Benwell, cuando cayó dentro del área herediana derribado por el guardameta Ricardo González. En realidad la falta era de penal.

Luego, ni qué decir del arbitraje de Hugo Cruz en el partido Alajuelense - Santos. Es de escuela primaria saber que la falta se sanciona donde fue cometida.

El equipo de Santos cobró un tiro libre a su favor a una distancia de cinco o más metros de donde fue cometida; el árbitro no podía saber -dada su ubicación- de dónde salió el balón cobrado por el Santos. Solo levantó sus manos corriendo detrás de los jugadores y concede un gol que no debió haberse dado como bueno.

En fin, ojalá esta jornada no vuelva a repetirse. Es difícil, pero nunca se sabe.