Gabriela Solano
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La sexta emisión de “Cantando por un sueño” tuvo un matiz diferente. No solo los dieces y la caída de Ricardo Padilla dieron de que hablar. El enojo y las molestias de los protagonistas le pusieron picante a la noche.

El merengue interpretado por los dúos le restó aburrimiento al programa, aunque algunas de las parejas nos quedaron debiendo el entusiasmo.

Apelar a la nostalgia de nuestra música romántica fue un punto a favor de la producción, lástima que algunos de esos éxitos fueron llevados al paredón de fusilamiento por las parejas.

La falta de afinación, mala dicción y la ausencia de expresividad le sigue pasando la factura a los competidores. Esta semana los sentenciados fueron: Édgar Murillo y Karla Mena, además de Sasha López y Édgar Barrantes, este último fue muy criticado por su deslucida participación, lo que causó el enojo y reclamo del presentador, quien asegura que los nervios y la ansiedad son los responsables de su desempeño.

“Fallamos y eso estuvo claro. Ahora trabajaremos fuerte para salvarnos y corregir lo que estuvo mal”, dijo la soñadora.

Durante la noche, también se anunció que el próximo sábado se realizará el primer duelo de la temporada entre: Carlos Alvarado (Camacho) y Daniel Moreno (Demasiado Honesto).

Lo picante

Tapón dijo que el juez Mkrtytchian tiene chineados y que algunos participantes fueron sus alumnos (Eduardo Aguirre, Bernardo Quesada, Kike Dodero).

A Ricardo Padilla le pusieron la pista musical antes de tiempo. Por cierto, María Marta López se fue atrás del escenario para saludarlo. Estaba tan feliz como fanática quinceañera.

Para atraer la atención, la producción ahora pone cápsulas con comentarios polémicos de los participantes.

Domingo y Stephanie cambiarán de profesor hoy.

Daniel llevó a su hija y dijo que ella fue su amuleto.

El sábado, las parejas cantarán salsa y un tema romántico junto a Editus. Su profesor los acompañará en una de las canciones.