Antonio ALFARO
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Saprissa no tendría nada que hacer en la final, si Sandra estuviera en la alineación rojinegra.

“Picante” y pícara (“solo en ciertas ocasiones”, aclara ella), se atreve a asegurar que esta vez ganará el cuadro manudo, incluso desde el primer juego en el Ricardo Saprissa. “Gana la Liga 2-1”.

¿Qué hace una joven de Moravia yendo con la Liga?

No sé. Mi mamá es saprissista y mi papá es liguista. Y yo me hice liguista.

¿Irá al estadio?

No, me da miedillo, porque que a veces la gente se pone violenta. Prefiero quedarme en la casa.

¿Entonces es más fácil encontrarla en Hooters?

Sí, a veces voy a trabajar.

¿Y es Sandra tan picante como las alitas?

(sonríe... calla... y vuelve sonreír) Solo de vez en cuando. En ocasiones.

¿Toma la iniciativa?

No, prefiero que sea el hombre quien la tome.

¿Y los piropos? ¿Le gustan más en español o en inglés (es estudiante de Enseñanza de Inglés)?

A lo tico. En inglés hay muchos que son vulgares.

¿Cree que la gente va al restaurante más por verlas a ustedes que por el menú?

Eso dicen algunas encuestas que se han hecho.

¿Cómo es Sandra?

Humilde, divertida, alegre.

¿Y físicamente? ¿Cuál diría es su mejor parte?

Mi cara.

¿Cree que la cara es lo que más le miran los hombres?

Diay no sé. Habría que preguntarle a ellos.

¿Se cambiaría algo?

No, me siento bien así. No es que esté en desacuerdo con las cirugías, pero por ahora no pienso en eso.

¿Cuáles son sus medidas?

83 (pecho), 62 (cintura) y 87 (cadera). Mido 1,60 m. y peso 45 kilos.

¿Sin quitarse peso?

Más bien estoy comiendo más para tener más carnita.