Rodolfo Martín
rmartin@aldia.co.cr

Un violento grupo de delincuentes dedicados al robo de vehículos mediante el método del “bajonazo” fue desarticulado ayer en la madrugada durante cinco allanamientos simultáneos a cargo del OIJ en San José, confirmó Jorge Rojas, director de ese cuerpo policial.

A la organización se le achaca –en los últimos cuatro meses– el robo de siete vehículos: dos Jeep Cherokees, un Hyundai Tuckson, tres Toyotas Prado y un Nissan Frontier.

Igualmente, otro Toyota Prado que abandonaron al percatarse de que era de diésel cuando lo “necesitaban” de gasolina.

El primer vehículo sustraído fue un Jeep Cherokee azul, en San Francisco de Dos Ríos, que, al parecer, usaron para robar los otros seis, trascendió ayer.

Los delincuentes interceptaban a sus víctimas después de atravesarles el Cherokee azul, como se denominó el operativo de ayer.

Las víctimas eran sorprendidas por tres y hasta cuatro sujetos de rostros cubierto y armados.

Los delincuentes retenían a los conductores mientras obtenían la información sobre los sistemas de alarma del vehículo y los despojaban de bienes como billeteras, bolsos y teléfonos celulares.

El otro Cherokee fue robado en San Pedro, frente a la Facultad de Derecho, se precisó.

Los tres Prados, mientras tanto, los hurtaron cerca de la rotonda de San Sebastián; en Escazú, por el Súper Saretto y cerca del peaje de la autopista Próspero Fernández.

Finalmente, también se llevaron un Nissan Frontier en Multiplaza de Escazú y un Hyundai Tuckson por la rotonda de Betania, en Montes de Oca, de acuerdo con la versión del OIJ.

Las autoridades recuperaron cuatro de los siete vehículos, dos Cherokees e igual cantidad de Toyotas Prado.

El líder es un sujeto de apellido Benavides, detenido en El Alto de La Trinidad de Moravia.

Lo conocen como “Feto” y le decomisaron un Mazda CX7 cuatro por cuatro, último modelo.

Benavides, al parecer, alcanzó esa posición tras una “carrera” iniciada hace nueve años.

Le incautaron documentos de otros vehículos denunciados como robados, su computadora, varias llaves maya, teléfonos celulares y valiosos relojes de pulsera que, presuntamente , pertenecían a las víctimas.

Igualmente, fue arrestado el segundo al mando de la banda, un hombre de apellido Pérez, llamado “Tochi”, quien cayó en la urbanización Carla María en El Alto de Guadalupe. A él, le decomisaron un Mitsubishi Montero.

Asimismo, fueron capturados tres sujetos de apellidos: Bejarano, Torres y Delgado –conocidos como “Gallo”, “Capo” y “Sádico”– en Aserrí, Moravia y Alajuelita, respectivamente.

Delgado permanecía en libertad condicional porque enfrentaba un proceso por asaltos bancarios, informaron fuentes del OIJ.

A los agentes de la Sección de Robo de Vehículos les urgía desarticular a toda la banda porque, dada su peligrosidad, se temía que en cualquier momentos pudieran acabar con la vida de algún conductor, se dijo.

Ayer permanecían a la orden de la Fiscalía.