Domingo 13 de diciembre de 2009, San José, Costa Rica
Sucesos | En Cedral de San Carlos
Casa de director de colegio fue arrasada por el fuego
Bomberos investigan si hubo mano criminal/ Perros hallaron acelerantes en dos sitios
  • AlDia.cr
    Un experto de la unidad canina del OIJ condujo al perro “Lex” por cada rincón de la casa durante varias horas. Carlos Hernández.
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    “Nanny” es un perro con vasta experiencia en la detección de materiales acelerantes tras incendios. Carlos Hernández.
  • AlDia.cr
    Las pérdidas se calculan en ¢15 millones, ya que las llamas acabaron con todos los electrodomésticos y menaje. Carlos Hernández.

Carlos Láscarez S. y Carlos Hernández, corresponsal
clascarez@aldia.co.cr

Ciudad Quesada.- En cuestión de minutos las llamas acabaron ayer con la vivienda que alquilaba el director del Colegio San Martín, Norman Castro, hecho en el que se sospecha pudo haber existido mano criminal.

La conflagración ocurrió a la 1:29 a.m . en Cedral, poblado situado 8 kilómetros al noreste del centro de Ciudad Quesada.

Al momento en que empezó el fuego no había nadie dentro de la casa, ya que sus moradores habían salido el viernes a Heredia con el fin de realizar varias diligencias laborales y personales.

Carlos Quesada Arce, dueño de la propiedad, aseguró que la casa la ocupaba el educador y su familia desde hace más de un año.

La primer unidad de bomberos llegó al sitio 6 minutos después de que se recibió la alerta, sin embargo, las llamas ya eran muy difíciles de controlar.

El bombero Guillermo Hernández Gómez indicó que a su arribo y ante la magnitud del fuego optaron por evitar que éste se extendiera a las casas del frente y de al lado. Mientras colaboraba para aplacar las llamas, desconocidos le sustrajeron su “scanner” personal, valorado en ¢450 mil.

Otra de las casas afectadas fue la del oficial de Fuerza Pública Nelson Peña, quien recordó que gracias a los gritos de una vecina pudo despertarse y lograr salir.

“Tenía hora y media de estar durmiendo, ya que había salido de trabajar a la medianoche. Si no hubiera sido porque escuché a la vecina no me hubiera dado cuenta de nada”, confesó asombrado.

En la tarde llegaron los perros de la unidad canina del OIJ, “Lex” y “Nanny”, quienes inspeccionaron el sitio. Hallaron acelerantes en un dormitorio y la cocina.

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