Isaac Zúñiga, colaborador
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“Flyleaf es la primera hoja en blanco en la parte frontal de un libro”.

Así explica Lacey Mosley, vocalista de la banda de metal alternativo, el nombre de la agrupación que se abre un espacio en la escena del rock mundial, desde el 2002 cuando irrumpió en Texas, Estados Unidos.

“Es la página de dedicación, donde escribes un mensaje a quien le estés regalando el libro. Y ese es el significado de nuestras canciones; un mensaje personal que proporciona momentos de claridad después que la historia comienza”, añade Mosley.

Y es que si hay algo que diferencia a Flyleaf del resto de las bandas del género, son principalmente las letras de sus canciones, todas con mensajes optimistas hacia los jóvenes, y no de críticas, como suele ser la costumbre en los grupos de rock.

Las temáticas que abordan son tan crudas como el abuso, la adicción a las drogas y también situaciones espirituales, como es el caso del track “All Around Me”, de su primera producción discográfica Flyleaf (2005), que invita a tener una relación fuerte con Dios.

Por ese estilo, la banda se ha considerado entre el rock cristiano, metal alternativo, por el carácter comercial de sus canciones, sonidos duros y ciertos gritos guturales que ejerce su vocalista, y “Post-Grunge”, debido al carácter melódico de sus “riffs” de guitarra, mezclado con elaborados coros.

Aparte de Mosley, Flyleaf la integran Sameer Bhattacharyn (guitarra), Pet Seals (bajo), Jared Hartmann (guitarra) y James Culpepper (batería).

Antes la banda tuvo que cambiarse de nombre, ya que se hacían llamar “Passerby”, pero otro grupo ya lo había registrado.

El mes pasado estrenaron su segundo disco “Memento Mori”, luego de casi cuatro años desde su álbum debut.

El sencillo conserva la esencia e intensidad de la producción anterior.