Alexander Aguilar
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Rafael Márquez, defensa de México y del FC Barcelona, se soltó a hablar, luego de varias semanas de silencio.

Lo hizo en amplia entrevista con el Diario Esto de su país, donde expresó el difícil sentimiento que lo embarga, luego de las fortísimas críticas que le cayeron encima, por haber sido expulsado contra Estados Unidos, el 11 de febrero, en el inicio de la hexagonal eliminatoria de CONCACAF.

“Estoy muy triste y muy dolido, porque por un error que cometí me han echado una culpa que no es nada más que mía. Estoy claro y consciente de que me equivoqué, pero me han cargado totalmente el muerto”, señaló Márquez. “Me ganó la desesperación, porque yo en la cancha me transformo, pero la culpa de lo pasado en Estados Unidos no es nada más mía”.

Fue más allá al decir que el mal momento de México tiene una “responsabilidad compartida y viene desde la mala planeación de los dirigentes, desde todo el entorno que rodea a la Selección. Viene de toda la guerra de los medios de comunicación por sacar notas y cosas que muchas veces no son verdad, y que se convierten en un amarillismo con tal de vender”.

Aseguró que “no me quiero pelear con nadie, pero las verdades hay que decirlas de frente y como van. El mal del fútbol mexicano parte de raíz. Viene desde los directivos, desde la administración, desde la forma de hacer las planeaciones, de la forma de manejar la Selección, de que opine gente que no tiene ni la mínima idea de lo que pasa aquí adentro”.

“Ya me cansé y por eso lo digo de frente, que los jugadores y el cuerpo técnico estamos solos, no tenemos el apoyo que debemos tener para afrontar las situaciones y salir adelante”.

Márquez concluye: “claro que aceptamos nuestra responsabilidad, pero de afuera no hay absolutamente apoyo para nosotros”.

De frente

“Decidí no hablar en México, ya que se tergiversan todas las declaraciones de la Selección que uno da”

Rafael Márquez, Defensa mexicano