Inglaterra / DPA.- La escocesa Susan Boyle, que causó sensación con su voz, llegó este domingo a la final del programa de talentos “Britain’s Got Talent” y está a un paso de lograr su sueño.

Cuando pisó el escenario por primera vez, el jurado se burló de ella, pero ahora todos los indicios apuntan a que ganará.

Con una interpretación del clásico “Memory”, del musical “Cats”, la cantante “amateur” encantó al jurado y al público. Y además, mientras que hace unas semanas la mujer de 48 años sorprendió por su vestimenta y cabellos descuidados, esta vez dejó a todos boquiabiertos, pero por lo contrario: por su elegante peinado y su brillante vestido.

Boyle no mostró estar nerviosa al alzar su potente voz. Y cuando sonó el último acorde, fue ovacionada de pie. La escocesa, desempleada y que afirma ser virgen, llamó la atención en todo el mundo en abril con su primera presentación.

Sin sentirse afectada por todo el ajetreo en torno a su persona, respondió a la pregunta este domingo de cómo había podido lidiar con la presión de la semana pasada: “¿Qué presión? Realmente la estoy pasando bien, disfruto cada segundo”.

Cuando se conoció el resultado de la votación, hizo un breve baile de celebración, porque lo único que ansía Boyle es presentarse ante la familia real. En caso de que se imponga en la final del sábado próximo, no sólo recibirá un cheque de más de 100.000 libras ($159.000), sino un pase para participar en el Royal Variety Show.

En su pueblo la gente está convencida de que ganará. El primer ministro escocés, Alex Salmond, afirmó: “Escocia estará con ella. Estoy seguro de que tiene madera como para ser la ganadora”.

En la casa de apuestas William Hill las probabilidades están a su favor como nunca antes.