Karla Barquero, colaboradora
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La magia de Brujas baila samba. Se trata del brasileño Anderson Andrade, quien llegó al territorio tico el pasado 27 de agosto, con el fin de romper las redes y ser la pócima que tanto necesitaban los hechiceros, para romper la maldición que no les permitía ganar.

Andrade, hombre de gustos sencillos, se siente bien en “Tiquicia”, y asegura que lo poco que conoce es parecido a su país natal y comenta que, dentro del cuadro de Brujas, se ha sentido a gusto.

“En el equipo me sorprendí, me trataron muy bien, como si estuviera desde hace mucho tiempo aquí”, aseguró.

Andrade, hombre de gustos sencillos, cree que “Tiquicia” y su país natal son muy parecidos en el clima, las personas e incluso, en el idioma.

“Al principio yo no hablaba nada de español, pero después noté que son idiomas muy parecidos”. De hecho, una anécdota graciosa le ocurrió con la comida típica de nuestro país.

“Me presentaron el Gallo Pinto, pero por el idioma pensaba que me iban a dar algo relacionado con el órgano genital masculino”, recordó, mientras esbozaba una enorme sonrisa.

Se declara una persona muy casera, razón por la cual extraña a su familia, quienes se encuentran en Sao Paulo; pero, eso sí, a futuro piensa traer a su esposa e hijos. “Pienso quedarme acá, ahorita es muy complicado traer a mi familia, espero que haya más estabilidad. Mi hijo es el que más quiere venir, siempre me pregunta cuándo puede viajar acá”.

Este padre abnegado le cambia hasta los pañales a sus hijos. “Disfruto mucho la crianza, si es necesario despertarme en la noche, lo hago”, comentó sin titubear.

Además de colocar a su familia como pilar, piensa que la alegría más grande que puede tener es a Dios en su vida, lo que refleja la religiosidad en su persona.

Como la mayoría de los niños, aprendió a jugar en la calle. “Comencé con mis amigos, que eran muy fanáticos, jugaban en las calles. Yo como profesional empecé a los 17”.

Si no hubiese elegido esta profesión, se habría inclinado por la aeronáutica, o quizás alguna rama de las matemáticas, que era en lo que le iba mejor en el colegio.

Según Andrade, el Campeonato Nacional es un torneo muy disputado, con buen nivel, “se juega sin saber quién va a ser el campeón, lo cual es emocionante para los aficionados”. Sin embargo, cree que le hace falta más profesionalismo, estadios mejores y canchas naturales.

También, “cambiar el pensamiento de los grandes jugadores, para que tengan humildad, además dar estabilidad a los entrenadores, porque los cambian mucho”. Andrade concluye que “tengo la necesidad de hacer goles, pretendo seguir anotando”.

Lo dijo

“A pesar de que Simoes es brasileño, no puede hacer milagros. Rodrigo Kenton debió seguir. René debió venir para ayudarlo, hacer una buena dupla”

“Creo que al llegar a Brujas vine con suerte, pero no es que llegué y cambié todo, sino que esto se lo debo gracias a Dios”

“Romario fue el mejor delantero del mundo, y Zidane el de mejor calidad técnica. Mi equipo favorito es el Sao Paulo de Brasil”