Washington / DPA.- Barack Obama puso hoy la carrera olímpica al rojo vivo al decidir invertir 18 de sus valiosas horas presidenciales para impulsar a Chicago en su lucha con Río de Janeiro, Madrid y Tokio.

"Tanto el presidente Obama como la primera Dama Michelle Obama realizarán presentaciones durante la sesión del viernes del COI", informó la Casa Blanca, poniendo así fin al pequeño culebrón que la presencia o no de Obama en Copenhague había generado en los últimos días.

La confirmación de Obama convertirá a Copenhague el viernes 2 en una exhibición de poder político destinada a seducir a un centenar de inasibles e imprevisibles miembros del COI (Comité Olímpico Internacional).

Además del jefe de Estado norteamericano también el primer ministro japonés, Yukio Hatoyama, confirmó hoy su presencia, para sumarse así a José Luis Rodríguez Zapatero, jefe del gobierno español, Juan Carlos I, rey de España, y Luiz Inacio Lula da Silva, presidente de Brasil.

La sede de los Juegos de 2016 se tomará por una diferencia de "dos, tres o cuatro votos", dijo recientemente Jacques Rogge, presidente del COI. La presencia de Obama, dueño de un gran carisma y oratoria, y uno de los políticos más populares del mundo, revitaliza indudablemente a Chicago.

Río de Janeiro, que llevó adelante la campaña más inteligente e imaginativa de las cuatro candidatas, tuvo una buena noticia antes de confirmarse la presencia de Obama: el newsletter "Around the Rings", basándose en su acceso a miembros del COI, la situó hoy en ventaja sobre Chicago, con Madrid y Tokio más distanciadas.