Carlos Hernández, corresponsal GN y Carlos Láscarez S.
clascarez@aldia.co.cr
San Carlos.- Los habitantes de La Tigra dejaron ayer sus ocupaciones y se lanzaron a las calles para darle el último adiós al bebé de año y ocho meses que falleció el lunes en el Hospital de Niños, luego de que cayó a un estanque de tilapias a la par de su vivienda.
La misa se efectuó a las 10 a.m. en el templo católico de La Lucha de La Tigra, el cual lució completamente abarrotado y se ubica a 30 kilómetros al noreste del centro de Ciudad Quesada.
Al féretro del bebé se acercaron decenas de personas, quienes no ocultaron su dolor e indignación ante el fatal desenlace que tuvo el pequeño.
Lo hicieron desde adultos mayores hasta pequeños del kínder , quienes durante unos minutos hicieron guardia de honor.
La homilía estuvo a cargo del cura párroco Félix Torres, quien hizo un llamado a los padres para que no se sintieran culpables por lo que pasó el domingo anterior.
“Ninguna persona quiere que sucedan hechos tan dolorosos como lo que pasó en esta comunidad. La vida no termina con su desaparición, simplemente se transforma”, dijo el sacerdote.
Rosa Vega, abuela paterna del bebé, afirmó que recuerda a su nieto cuando el sábado pasado estaba alegre y jugando en el área verde. Dijo que en aquel instante era imposible pensar que horas después se apagaría su vida para siempre. El vecino José Vásquez, dijo que sólo queda aceptar la voluntad de Dios por dura que sea.
© 2010. Periódico Al Día. El contenido de aldia.cr no puede ser reproducido, transmitido ni distribuido total o parcialmente sin la autorización previa y por escrito del Periódico Al Día. Si usted necesita mayor información o brindar recomendaciones, escriba a webmaster@aldia.co.cr.